Carlos Lariño, uno de los integrantes del cuerpo médico del Deportivo está viviendo en primera persona y en primera línea del CHUAC, donde ejerce como voluntario, los avatares de esta "guerra" llamada pandemia y ocasionada por el Covid-19. Un escenario completamente distinto al que le toca vivir en el día a día con los futbolistas del primer equipo blanquiazul. "Es duro pasar de Disney a la guerra. Del mundo del fútbol a las urgencias de un hospital general cambian las cosas y se hacen un poco duras, pero contento de poder ayudar", explicó el galeno deportivista en rueda de prensa.

Para el doctor Lariño esta está siendo "una experiencia muy bonita y muy intensa desde el punto de vista médico". Experiencia que vive después de decidir presentarse como voluntario "para intentar echar una mano" en estos momentos al lado de "unos profesionales excelentes, abnegados y que destacan por lo que son capaces de hacer con pocos medios", valora el médico blanquiazul. "Los aplausos de las ocho de la tarde son escasos por todo lo que están haciendo, una labor increíble".

Esta nueva experiencia parece llenarlo, quizá por eso ni se acuerde del fútbol, una actividad de la que se dice que podría reiniciarse en un breve espacio de tiempo. "Plantearnos iniciar la actividad deportiva está un poco en segundo plano todavía", asevera el médico del Deportivo.