Keko Gontán (Brunete, 1991) inicia la semana del regreso de la Liga con una mezcla de sensaciones por la incertidumbre de adentrarse en un escenario competitivo inédito para todos: "Hay ganas, pero también hay nerviosismo por saber cómo vamos a responder". En ese sentido, considera "importantísimo" el reestreno ante el Sporting del domingo en Riazor (17.00 horas), un partido "no definitivo", pero que seguro "va a marcar la línea de los otros diez". "El míster nos ha dicho que va a necesitar de todos", confiesa el futbolista madrileño, hasta ahora con una presencia testimonial -solo 45 minutos- desde su llegada al Deportivo en enero.

¿A medida que se acerca el primer partido están cada vez con más ganas de competir?

Sí. Con las ganas y también el nerviosismo que trae toda esta situación por saber cómo responderemos ante un campo que no tiene público, ya que nunca hemos jugado así y es casi como un entrenamiento pero al final estás compitiendo y te estás jugando mucho, y también por saber cómo vamos a responder físicamente después de dos meses parados. Después de toda esta incertidumbre, sí es cierto que hay ganas, pero también hay nerviosismo.

¿Cómo llega el equipo físicamente?

Muy bien. Hemos trabajado muy bien, muy intensos, y sí es cierto que la falta de partidos amistosos se va a notar. En pretemporada uno no tiene ritmo por mucho que esté entrenando a full, y lo va cogiendo a medida que va jugando partidos. Ni siquiera hemos podido jugar amistosos y entrenando todos juntos llevamos, como quien dice, una semana. Dentro de todas las circunstancias difíciles, el equipo ha hecho lo máximo posible y nos hemos preparado bien dentro de los límites que tenemos.

¿Es clave empezar ganando para salir ya del descenso?

Estoy seguro al 100% de que el primer partido, no digo que vaya a ser definitivo, pero va a marcar la línea de los siguientes diez. Te va a dar la tranquilidad para afrontar los siguientes o la ansiedad de que luego cada encuentro va a ser una final. El primer partido para nosotros es importantísimo para coger buenas sensaciones, coger confianza y olvidarnos de la dinámica negativa que habíamos tenido en los últimos dos o tres partidos antes del confinamiento y marcar una nueva línea de lo que queremos ser como equipo, olvidar todo lo que fuimos en el pasado en esta Liga, y como empezar una nueva liga de doce equipos.

Mollejo está sancionado, Çolak tocado y Aketxe lesionado.

Son futbolistas que venían jugando, no sé si al final llegarán o no, pero en esta situación somos conscientes de que la fuerza va a estar en el grupo e incluso los que no tengan molestias hay veces que no podrán jugar por la fatiga y demás. Si no juegan unos, jugarán otros. Confiamos en la fuerza del grupo.

¿El Dépor parte con ventaja con respecto a sus rivales directos por contar con una plantilla en teoría más amplia y equilibrada?

No sé porque no he analizado las otras. Nosotros tenemos una plantilla bastante compensada y creo que preparada. Sí es cierto que va a ser fundamental porque los futbolistas, después de dos meses parados, no estamos preparados para jugar partidos cada 72 horas. Entonces el míster va a necesitar de todos los compañeros, de que estén preparados al 100% para competir.

Apenas jugó desde su llegada, ¿espera contar más ahora?

Sí, no te voy a engañar. Yo vine aquí para jugar, eso antes del confinamiento no se dio y ahora espero encontrar la oportunidad, los minutos e ir asentándome en el equipo.

¿Ha hablado con usted Fernando Vázquez?

Personalmente no ha hablado conmigo, ha hablado con todos y él nos ha dicho que es consciente de que va a necesitar de todos, que para él siempre lo más importante es el equipo y que simplemente tenemos que prepararnos lo mejor que podamos cada uno porque nos va a necesitar.

¿Preocupa el desconocimiento sobre cómo se resolvería la competición si al final no se pueden completar todas las jornadas?

Ahora mismo no nos lo planteamos. Llegados a esta situación, todos confiamos en que la Liga se va a acabar. Estamos en un punto, a nivel de sociedad, en el que el coronavirus parece ser que está bastante controlado. Tendría que ser una catástrofe que la Liga no se acabase. Es algo que ninguno contemplamos.

¿Desapareció por completo el miedo a contagiarse?

Es cierto que los primeros días cuando empiezas a entrenar hay ese temor, el síndrome ese por empezar a salir a la calle después de haber estado dos meses en casa como un ermitaño. Eso ya está superado. A nivel de sociedad cada día se van quitando los miedos porque parece ser que el virus está controlado y, aparte, nosotros tenemos inspectores [de LaLiga] que trabajan muy bien, estamos llevando un método muy riguroso para intentar evitar contagios y estamos siendo bastante responsables. Ese miedo yo no lo veo en la cabeza de los compañeros ni de ninguno de los que estamos para competir.

¿Sin público tendrán que hacer un esfuerzo mental extra para activarse?

Va a exigir un ejercicio especial por nuestra parte para conseguir ese puntito de tensión, buscándolo en lo que nos estamos jugando, en lo importante que es, ya que a veces lo conseguías simplemente con tener al público ahí que te está arengando o que te está metiendo presión, pero somos profesionales y sabemos lo que nos jugamos. No creo que a nosotros, a los jugadores del Dépor, nos haga falta esa tensión. Sí es cierto que será un poco extraño y habrá que ver cómo respondemos ante esas sensaciones, pero el punto de tensión no nos va a faltar.

¿Sale el Deportivo perjudicado con los estadios vacíos?

Sí es verdad que el Dépor en su campo es uno de los equipos fuertes de la Liga. No sé si salimos perdiendo pero por lo que se está viendo, que ya no hay favoritismos, obviamente a los equipos grandes de la categoría sí que nos perjudica.

Su renovación automática depende de que el Dépor siga en Segunda, ¿otra motivación extra?

Sí, por supuesto. Ahora mismo el futuro de la mayoría de los jugadores de la plantilla está en el aire, por eso digo que nosotros no creo que necesitemos ese puntito de tensión de la gente porque sabemos lo que nos estamos jugando.