La expedición del Fuenlabrada está pendiente de las pruebas a las que jugadores, técnicos y empleados fueron sometidos ayer para saber si algunos pueden empezar ya a abandonar la ciudad y el aislamiento en el que se encuentran desde el pasado lunes.

La esperanza del club madrileño es que aquellos cuyo resultado sea negativo puedan marcharse de A Coruña, aunque el miércoles la Xunta advirtió que todos los integrantes de la expedición deberán cumplir al menos 14 días de cuarentena.

El Fuenlabrada indicó también el miércoles que la evolución de todos los integrantes de la expedición durante los últimos días había sido "muy buena" y por eso planteó la posibilidad de que el partido suspendido contra el Deportivo se disputase a partir del domingo.

El club blanquiazul se ha mostrado contrario a esa posibilidad mientras no se repita la jornada de manera íntegra.

Esta semana también recibió el alta Chico Flores, el jugador del Fuenlabrada que tuvo que ser ingresado en un centro hospitalario de la ciudad después de sufrir un desmayo mientras era sometido a una de las pruebas diagnósticas. El defensa, a su regreso al hotel, también mostró la voluntad del conjunto madrileño de jugar ese partido suspendido contra el Deportivo.