El Juzgado central contencioso administrativo de Madrid rechazó paralizar el inicio de la competición en Segunda División tal y como habían solicitado tanto el Deportivo como el Numancia. El tribunal denegó la solicitud de la medida cautelarísima planteada por ambos clubes, pero al mismo tiempo trasladó al Consejo Superior de Deportes (CSD) una petición para que se pronuncie sobre el arranque del campeonato, previsto para este fin de semana, en el plazo máximo de cuatro días, en lugar de los 10 que suelen ser habituales.

El Deportivo aguarda así el posicionamiento del organismo gubernamental, cuya postura ya fue decisiva para forzar el sorteo del calendario y descartar la posibilidad de una liga con 24 equipos, para seguir con su estrategia en los tribunales, pero no parece probable que se muestre partidario de frenar el arranque de la competición, ni siquiera después de que ayer el Gobierno promoviera ante la Fiscalía una investigación para aclarar los vínculos del presidente de LaLiga, Javier Tebas, con el Fuenlabrada.

Tanto el Deportivo como el Numancia, precisamente, habían solicitado la semana pasada la paralización del comienzo del campeonato hasta que no se aclarase lo ocurrido en relación al partido que debían disputar los coruñeses contra los madrileños y que se aplazó por la aparición de varios contagios que derivaron en un brote de hasta 28 casos. El club deportivista, al igual que el soriano, sostiene que la cancelación únicamente del encuentro que debía disputarse en Riazor supuso la alteración de la competición. Por eso trasladaron al juzgado la petición de paralizar el arranque de la Segunda División previsto para esta semana.

El contencioso administrativo central, sin embargo, rechazó esa posibilidad a la espera de una decisión definitiva en cuanto se pronuncie el CSD y dé su opinión al respecto. Entiende el juez que frenar el inicio podría condicionar el desarrollo de la competición. "Desde la perspectiva de la ponderación de los intereses en conflicto, tampoco se acredita que el interés invocado pudiera prevalecer frente al interés público consistente en el temporáneo desarrollo de las competiciones deportivas oficiales", recoge la resolución.

La decisión definitiva queda así en manos del CSD, determinante para resolver el conflicto planteado entre LaLiga y la Federación por el caso Fuenlabrada. El organismo gubernamental se alineó con los postulados de Tebas y en contra de un campeonato de 24 equipos inmediatamente después de que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) dictaminase que el Comité de Competición no era competente para juzgar la actuación del Fuenlabrada y decidir sobre su descenso administrativo, como planteó el juez instructor de la Federación.