El Deportivo arrancará el domingo la competición después de un verano atípico marcado por la incertidumbre derivada del caso Fuenlabrada y una pretemporada de más de dos meses en la que ha tenido que dar forma a su proyecto en Segunda División B para afrontar con garantías el regreso al fútbol profesional. Después de una completa reconstrucción, el equipo afrontará el estreno ante el Salamanca con muchas incógnitas todavía por despejar y pocas certezas de antemano.

Fernando Vázquez, la referencia del proyecto. El entrenador partirá de nuevo como la figura más reconocible del conjunto blanquiazul. Su prestigio entre la afición se mantiene intacto y está llamado a liderar desde el banquillo al Deportivo en una categoría desconocida y de la que no ha ocultado que le disgusta el sistema de competición. Buena parte de la presión recaerá también sobre él como elemento más representativo de un proyecto ambicioso destinado a regresar a Segunda División.

En busca de los líderes de la plantilla. El club consiguió retener a algunos de los jugadores de la equipo del curso pasado, que de inicio partirán como los más importantes esta campaña. Álex Bergantiños mantendrá su estatus dentro del vestuario, pero Celso Borges tendrá un papel importante después de convertirse en la incorporación de referencia durante el verano. Beauvue, Keko Gontán y Uche Agbo arrancan también la temporada como figuras clave para afrontar el objetivo del ascenso.

Giro en el sistema. Fernando Vázquez aparcará esta temporada el esquema con cinco defensas sobre el que construyó la reacción del equipo la temporada pasada. Las pruebas durante la pretemporada estuvieron dirigidas a lograr que los jugadores asimilaran un 4-4-2 casi inamovible y que por momentos pareció aún provisional. Aunque lo desee, al entrenador deportivista le costará volver a la defensa de cinco porque apenas cuenta con tres centrales en la plantilla (Borja Granero, Mujaid y Derik Osede). En la recámara dispone de Álex Bergantiños para adaptarse a esa posición y del canterano Juan Rodríguez.

Las dudas ofensivas. El gol ha sido la asignatura pendiente de la pretemporada y escasea un perfil de futbolista que pueda jugar por detrás de los puntas. Fernando Vázquez solo cuenta en esa posición con Nacho González, pero la respuesta que pueda ofrecer el uruguayo en su estreno en el fútbol europeo es todavía una incógnita. No hay más mediapuntas en un equipo que ha centrado su producción ofensiva durante los amistosos de pretemporada en la aportación de jugadores de banda como Keko Gontán o Lara.

La respuesta a la presión. El Dépor partirá con el papel de favorito al ascenso ya no solo en su grupo, sino en toda la categoría. Está por ver cómo responde el equipo ante esa exigencia y la manera en la que plantearán los partidos la mayoría de los rivales. Probablemente se le obligue a ser protagonista en sus compromisos y está por ver si por juego puede serlo a través de los planteamientos.