Fernando Vázquez reconoce que el equipo está todavía lejos de alcanzar la versión que a él le gustaría, pero al mismo tiempo solicita paciencia y tiempo en medio de las dudas que han despertado los dos primeros partidos de la temporada. Entiende las críticas, pero a la vez reclama comprensión antes de visitar mañana Salamanca para enfrentarse a Unionistas en la que será otra reválida para el proyecto. "Necesitamos apoyo, necesitamos confianza, necesitamos seguridad y necesitamos que la ciudad, la afición y el deportivismo estén con el equipo, nos harán muchísimo mejores", enumeró el técnico deportivista.

Vázquez se esfuerza para que entre los aficionados no cale la idea de que la categoría es una bicoca, por más que el Deportivo sea el principal favorito y disponga de más recursos que nadie. "Solo le pido a la afición que no se deje llevar de repente porque se crearon unas expectativas demasiado elevadas", argumentó.

El técnico toca para ello la tecla emocional, en la que es experto y tantas veces le ha dado resultado. "A mí lo que me preocupa es que la gente pueda perder la esperanza, la ilusión o la fe en el equipo o en los jugadores. Un futbolista se desarrolla mejor si sabe que está apoyado y la gente confía en él y cree en él. Considero que el año pasado esa sensación de que la gente estaba detrás del equipo fue clave para acercarnos al objetivo", argumentó. "El equipo va a ser aquello que los aficionados quieran que sea. Es como la profecía autocumplida: si crees en el equipo, este va a dar un nivel superior y va a ser más competitivo y mejor; si desconfías ya de inicio, es posible que esa sensación llegue al equipo y este no pueda alcanzar las cotas para las que está preparado. El objetivo se va a conseguir cuando se vaya a conseguir, no ahora. Ahora el equipo necesita sentir que son buenos futbolistas y van a formar un buen equipo. Nos ayudaría mutuamente. Que esa unidad del año pasado no se rompa de inicio", solicitó Vázquez ayer a los aficionados blanquiazules.

El equipo, sin embargo, aún no ha ofrecido una versión convincente que inspire confianza. Vázquez destacó que trabajan para ser un equipo "agresivo" con una identidad propia. "La actitud del equipo no es la de esperar, ni de replegar, es más agresiva. Es lo que estoy intentando. Es verdad que no lo hacemos de forma perfecta, o nos falta confianza suficiente para hacerlo, pero vamos evolucionando hacia ahí. Si esa estrategia de presionar y robar alto no funciona, hay más estrategias esperando para ser utilizadas", manifestó Vázquez.