El Deportivo afronta el paréntesis en la competición como una oportunidad para recuperar a los jugadores que Fernando Vázquez perdió en las últimas semanas debido a las lesiones. Prácticamente una línea defensiva al completo se le cayó debido a los problemas de Eneko Bóveda, Salva Ruiz, Borja Granero y Derik Osede. Con los tres primeros podrá volver a contar la semana que viene en el partido contra el Guijuelo, aliviando la situación que ha padecido en los compromisos más recientes, y está por ver si Derik consigue superar con garantías la rotura muscular que sufrió en el sóleo.
El parón de esta semana permitirá al mismo tiempo para que los jugadores a los que se les ha visto más justos en este inicio de campeonato mejoren su forma física. Esta semana será especialmente importante para Miku, al que Vázquez espera en su mejor estado para decidirse a dar el paso de jugar con dos delanteros. También para Uche, que el domingo pasado contra el Coruxo fue titular por primera vez y se mostró como un jugador determinante a pesar de no encontrarse todavía en plenitud.
Otros como Nacho González también podrán aprovechar para continuar con una adaptación que se les resiste. El jugador uruguayo, que ha contado con la confianza de Fernando Vázquez, no ha ofrecido un rendimiento convincente en los cuatro primeros partidos y tendrá un margen ahora para mejorar.
El paréntesis servirá también para comprobar en qué estado se encuentra Diego Rolan después de su regreso. El delantero uruguayo, tras viajar a su país para completar los trámites burocráticos que le permitan jugar con el equipo, tiene previsto reincorporarse esta mañana en Abegondo a los entrenamientos después de casi un mes.
Rolan apenas se ejercitó unos días a las órdenes de Fernando Vázquez después de que se confirmase su continuidad. El club no logró encontrarle una salida y no hizo tampoco pretemporada. El delantero deberá ahora recuperar terreno con respecto al resto de la plantilla con vistas a un posible estreno oficial este curso con la camiseta del Deportivo.
Fernando Vázquez también podrá aprovechar esta semana sin competición para pulir los mecanismos de un equipo que convence a partir de sus resultados, pero que muestra lagunas, especialmente en lo que se refiere a la elaboración del juego ofensivo.
