Diego Rolan ya es uno más a las órdenes de Fernando Vázquez después de que ayer completara todas las tareas con normalidad junto a sus compañeros en Abegondo. El uruguayo viajó a su país a mediados de octubre con el propósito de obtener la documentación necesaria para competir en Segunda B y, una vez finalizados esos trámites legales, regresó a A Coruña para reincorporarse a los entrenamientos con el Deportivo. Llega con un tono físico lo suficientemente bueno como para encajar de inmediato en la dinámica grupal, sin período de adaptación, así que en principio debería estar disponible para cuando se reanude la competición, el fin de semana del 22 de noviembre con la visita a Guijuelo. Sonriente durante la carrera continua del calentamiento, que completó intercambiando impresiones con Claudio Beauvue, el delantero charrúa participó en todos los ejercicios, incluido el partidillo final a medio campo. Pese a tener jet lag por el reciente viaje desde Uruguay, ayer entrenó muy bien y con una predisposición buenísima, según aseguran desde dentro del vestuario blanquiazul.

Su regreso abre aún más el abanico de opciones de las que dispone Vázquez para componer el ataque, hasta ahora la línea más floja del equipo en lo que va a de temporada. De los arietes en nómina, solo Beauvue ha visto puerta en las cuatro jornadas disputadas. Marcó el primero de los dos goles con los que el Dépor se deshizo del Salamanca en Riazor. Luego anotaron dos laterales -Bóveda también en el estreno y Héctor Hernández ante Unionistas- y el extremo Lara el pasado fin de semana contra el Coruxo. Miku aún no mojó, al igual que Rui Costa, cuyo papel hasta ahora ha sido testimonial, mientras que el fabrilista Adri Castro sigue a la espera de que le llegue su primera oportunidad con el Deportivo.

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Rolan entrena con el grupo y Valín, lesionado

Precisamente con el canterano y Miku compartió equipo Rolan en el partidillo final a medio campo con el que finalizó el entrenamiento de ayer. El uruguayo participó bastante y apareció tanto por fuera como por dentro, a veces en carrera y otras de espaldas para aguantar el balón y dar continuidad al juego. Puede actuar en cualquiera de las posiciones de vanguardia, tanto en la punta de ataque como de segundo delantero o en la banda. Polivalencia, calidad y gol al servicio del Dépor mientras el club espera al inminente mercado invernal para tomar una decisión definitiva sobre su posible venta. Mientras tanto, Diego Rolan es jugador del equipo coruñés y Vázquez, según ha asegurado públicamente, tiene intención de utilizarlo si lo ve en condiciones para competir, tanto físicas como desde el punto de vista anímico y de implicación.

"Nos puede dar mucho"

En Segunda B debe ser un jugador diferencial y como tal lo ven sus compañeros. Por ejemplo, Borja Galán, convencido de que Rolan "puede dar mucho" durante el tiempo que permanezca en A Coruña. "Ha entrenado con nosotros después de arreglar los papeles allí en Uruguay y lo he visto bien. Ha entrenado bien, al mismo ritmo que el resto de compañeros y no creo que le cueste mucho coger la forma. Hay que ayudarlo en lo que necesite, él nos ayudará a nosotros y estamos contentos de que esté con nosotros", apuntó el extremo.

A juicio de Galán, el protagonismo mayor o menor que vaya a tener el delantero dependerá, sobre todo, de él mismo. "Es un compañero más. Él está dispuesto a ayudarnos. Va a depender un poco de cómo se encuentre físicamente. Es un jugador que nos puede dar mucho, igual que nos pueden dar mucho otros futbolistas, y va a estar un poco en él la clave de que nos pueda ayudar más o menos", analizó el exfabrilista tras ejercitarse en Abegondo. Diego Rolan firmó por el Deportivo en 2017 procedente del Girondins de Burdeos, pero desde entonces encadenó una sucesión de cesiones sin llegar a estrenarse en partido oficial con la camiseta blanquiazul. Málaga, Leganés, Alavés y Juárez fueron sus escalas antes de regresar a A Coruña después de que el club lo inscribiera para Segunda B al no colmarle ninguna de las ofertas que llegaron por él en el mercado veraniego.