Antonio Couceiro, el nuevo presidente del Deportivo, se refirió a la cantera en numerosas ocasiones en su primera intervención como máximo responsable de la sociedad anónima deportiva. Un término que más de uno se imagina en mayúsculas aunque al mismo tiempo lo entiende como una palabra clave, como marcan los cánones del marketing, que tiene que utilizar todo aquel que accede a la presidencia de la entidad blanquiazul. Tiene que luchar Couceiro contra muchos años de decepción con respecto a este asunto, entre ellos los últimos veinte que son los que casi tiene la Ciudad Deportiva de Abegondo. “Es solo una imagen; solo sirve para entrenar”. Son dos frases que salen de algunos aficionados y además integrantes de diversas peñas. Los consultados son peñistas, socios y accionistas.

En la distancia quizá se aprecien las cosas de manera diferente a como lo hace uno que está metido en el meollo. Paco Roca sufre como deportivista desde la cuna, incluso antes, y lo hace desde su Vilalba natal pero también desde A Coruña. “Tengo ahí casa pero con esto que estamos viviendo no nos podemos mover”, se lamenta. Ya no solo porque no puede acudir a Riazor, sino porque le gusta disfrutar de la ciudad. Y de su equipo. “Lo que estamos viviendo es insufrible; quizá sea algo que va en nuestros genes deportivistas”. Lo dice desde Vilalba, donde su padre fundó la peña blanquiazul hace… De ahí llegaron Vicente Celeiro y ahora Villares, un orgullo personal para Roca. “Aquí somos muy deportivistas y también hay celtistas, y que dos chavales de aquí hayan vestido la camiseta blanquiazul es un orgullo”.

Dos de los futbolistas de casa que llegaron al primer equipo, pero no son dos futbolistas de la cantera. De eso es de lo que habló el pasado martes Antonio Couceiro. “Estoy contento de escuchar estas palabras, pero que no sean solo palabras”, decía Paco Roca. “Llevamos escuchando esto muchos años, pero hay que tener un proyecto y además acompañarlo de paciencia; que fue lo que dijo Couceiro y estoy de acuerdo con él en este aspecto”. El asunto es que a Pacheco Fraga, otro habitual de Riazor, aunque se tenga que desplazar todos los días de partido desde Burela, las palabras del nuevo presidente le suenan “muy bonitas”. Este era un año para darle salida a jugadores de la cantera, si es que sirven, porque las palabras de Antonio Couceiro suenan lindas, como las de todos los que llegan, nada más. Esta vez establezco una diferencia, que es un presidente no ejecutivo y que cuenta con el apoyo del accionista mayoritario, eso significa que si tiene que invertir lo hará con mayor sentido. Nunca supimos los accionistas lo que se invierte en Abegondo, para mí solo es un sitio en el que se puede entrenar; una imagen”.

También desde la distancia habla Ana Guerra (peña Chamberí) y exdirectiva de la Federación de Peñas. “Nos gusta oír hablar de la cantera, y a mí personalmente mucho. Es evidente que si se habla de la cantera es porque no queda más remedio y si no hay más jugadores es porque no habrá calidad, pero este es un trabajo de mucho tiempo y que requiere mucha paciencia”, explica esta accionista desde Madrid. Si el Deportivo tiene que estar en Segunda B (Primera de la FEF) no es problema para estos socios y accionistas, “si Abanca sigue detrás y dice que hay un proyecto, no ascender no es problema”, coinciden los tres consultados. “Si hay un proyecto, adelante”, también destacan. Ya parece que no hay prisa, más bien quizás exista resignación.

Mucho más cerca, en pleno centro de la ciudad tiene su sede la peña A Estrella, en A Casiña, la más antigua de la ciudad. Desde ahí David García hace de portavoz de sus compañeros. “¡Cantera! Una palabra bonita que se utiliza de vez en cuando. Ojalá cumpla Couceiro lo que está diciendo; nosotros, yo, respaldaría esta decisión y con paciencia. Para qué gastar tanto dinero en gente de fuera que al final no aporta nada. Darle cancha a los de casa que es mucho mejor; eso sí, si tienen condiciones”, explica el responsable de esta peña blanquiazul. Resignado, como la mayoría, acepta casi cualquier palabra. “Tenemos que ser pacientes, pero llevamos mucho tiempo de sufrimiento. “¿De que sirvió Abegondo? Para entrenar”, asevera. “Todos los jugadores de A Coruña que destacaron están lejos de aquí”, se lamenta.

Un espacio deportivo inaugurado en 2003 y al que se le dio por llamar el Mundo del Fútbol. ¿Sus resultados en forma de aportación al primer equipo? Ni Mujaid, ni Villares, ni Rayco, ni Edu Expósito lo son a pesar de proceder el Fabril. Ni tampoco Álex Bergantiños, el último gran canterano del primer equipo. Sí habría que considerar como productos de Abegondo a Valín y a Gandoy. Dos futbolistas desde 2003. “No hay más; es solo imagen”, destaca Fraga. “Los jugadores formados en Abegondo están todos fuera del Deportivo, ¿por qué?”.