La situación del Deportivo requiere ya no de los mejores, sino de once que sean capaces de hacerlo lo mejor posible. El otro día contra el Pontevedra se quedaron sin jugar algunos a priori titularísimos y a lo mejor esa es la línea de lo que está buscando el entrenador, un once donde remen todos. No digo que los otros no lo hagan, pero a veces se necesitan once guerreros que den lo mejor de sí.

A Lucho lo veo bien, sobre todo porque ha asumido el reto de la portería en un momento complicado y, además, mermado físicamente por su lesión en el tabique. En ese sentido, hay que valorar su actuación. El otro día nos quitó a todos un peso de encima con ese paradón que hizo al final. Me está gustando. Pensé que el cambio de portero respondía a un tema del manejo del juego con el pie, pero visto cómo está jugando el equipo, no creo que sea esa la razón. Ahora mismo hay que valorarlo y dicho esto también creo que no podemos, por así decirlo, poner a Carlos Abad como el responsable de la anterior racha. Aunque había fallado algo en los últimos partidos, creo que estaba dando un buen nivel.

Por encima de todos pondría la actuación de Álex Bergantiños con ese papel táctico que le asignó Rubén de la Barrera, muchos ratos de central y encargándose de iniciar el juego. Junto a Villares y Raí, creo que los tres le dieron más velocidad al juego, sobre todo en los primeros momentos. Para mí es muy importante tener canteranos deportivistas en el primer equipo. Sienten diferente lo que es el club y eso es un valor añadido.

Keko al principio de temporada fue el jugador diferencial que es, lo que pasa es que las lesiones y el jugar a medias no nos han permitido disfrutar de él. Sigo pensando que es un futbolista diferencial en la categoría, como lo fue al inicio. Ahora tiene más gente con la que asociarse y eso le viene bien. Creo que va a dar buenas cosas el resto de la temporada. Además, tiene gol, como demostró contra el Pontevedra.