Diego Villares, con el trofeo Estrella Galicia al mejor jugador de la temporada, espera que este Dépor sea punto y seguido. Y la primera piedra es Rubén de la Barrera. "Confiamos en que el míster siga. Hay una idea de continuidad que se transmite en el grupo. La gente está contenta y quiere hacer un buen año", apunta el mediocentro, que en solo seis meses ha conseguido ser el predilecto de los aficionados.
Villares se adapta a su nueva vida como uno de los referentes del nuevo Dépor. Aún pasa "desapercibido" y si es por él se vincularía todavía más a su club. Tiene contrato hasta junio de 2022, aunque está abierto a ir más allá porque como en el Dépor "no está en ningún sitio".
El fabrilista es la avanzadilla de un proyecto de la cantera que espera que haga que todos esos jugadores estén "más cerca" del primer equipo. El de Vilalba admite que le ha ido "de cine" el rol encomendado por el técnico entre Álex y un tercer mediocentro.
