Todo proyecto de cantera necesita una apuesta decidida y materia prima y el Dépor aún debe tomar decisiones estratégicas sobre algunos de sus mejores valores de Abegondo, como es el caso de Yeremay Hernández, Peke. El futbolista canario, fichado en edad cadete del Real Madrid, siempre fue uno de los futbolistas en los que había depositadas más esperanzas, pero esta temporada ha logrado por fin ser una de las grandes irrupciones en la base blanquiazul. Aún edad juvenil, pasó en unos meses de jugar en su categoría a pisar el acelerador en el Fabril y a formar parte de dos convocatorias del primer equipo y rozar el debut. Llega el momento de que el club coruñés tome decisiones importantes y con cierto grado de implicación sobre el futuro de uno de los jugadores más decisivos y llamativos de su vivero.

Justo cuando ha pasado de promesa a instalarse a un paso de convertirse en una realidad, Peke acaba contrato con el Dépor dentro de mes y medio, después de haber firmado su primera vinculación profesional, con 16 años recién cumplidos, en diciembre de 2018. Entonces, en las cláusulas del contrato en el que estampó su firma, el club coruñés se guardaba la opción de extender esa unión tres años más, hasta junio de 2024. Para convertir esta posibilidad en realidad, las condiciones económicas estaban ajustadas a las de un jugador importante de un filial de un equipo en el fútbol profesional. El Dépor estaba entonces en Segunda, camino de Primera con Natxo González en el banquillo. Ha pasado el tiempo y el equipo coruñés se ha convertido en un conjunto de Segunda B o de Primera Federación y el listón económico que debe afrontar ahora el Deportivo para quedárselo, le convertirían de facto en futbolista del primer equipo blanquiazul. No le asegura ficha con los mayores, pero el esfuerzo, para una entidad que se apretará el cinturón, le colocaría en ese escalafón.

Ambas partes tienen la intención de que Yeremay siga en el Dépor y trace en Riazor sus características diagonales desde la banda izquierda, pero el club aún medita si dar el paso y cómo afrontarlo, qué encaje darle. Tiene el poder de decisión en su mano, mientras otros equipos (sobre todo filiales en la nueva Primera Federación y equipos primavera italianos) esperan acontecimientos para moverse por un futbolista vistoso y decisivo, con todas papeletas para convertirse en un activo de mercado en un Dépor con necesidad de ir haciendo caja de manera regular.