Borja Jiménez lleva semanas preparando de la mano de la secretaría técnica que encabeza Carlos Rosende lo que será el Deportivo de la temporada que viene. Eso se ha traducido en las llegadas de Juan Carlos Menudo, Diego Aguirre, Alberto Quiles e Ian Mackay, pero hasta ayer no se había podido escuchar al nuevo entrenador exponer su proyecto desde que firmó su contrato por dos temporadas a comienzos de mes. Para él no es un paso cualquiera, y lo dejó claro ayer. “Poder ser parte del Deportivo es lo más grande”, aseguró. La grandeza del club, reflexionó, puede quedar un poco difuminada en su entorno más cercano, pero no para los que como él se encuentran con una oportunidad como la que le llegó hace unas semanas. “Cuando se abrió la posibilidad de entrenar al Dépor tenía muy claro que quería estar aquí y paralizamos lo que teníamos de otras categorías”, desveló.

Un proyecto con el ascenso como meta. Jiménez es consciente de la inestabilidad que se ha experimentado en el banquillo del club, pero se resiste a pensar que su paso sea efímero. “Una vez que vienes al Dépor mejorar es casi imposible. Ya estás en un gran club. La idea que tengo es estar aquí muchos años, crecer de la mano del club”, manifestó. Para lograrlo tendrá que materializar un ascenso que ya consiguió antes con Mirandés y Cartagena, pero que se presenta como un trayecto largo y pedregoso. “El objetivo es ascender., tenemos que devolver al club al fútbol profesional. Sí que quiero dejar claro que no se va a ascender en septiembre ni ahora por firmar bien, va a ser un camino muy largo”, advirtió.

El estilo de juego. Borja Jiménez aterriza en el banquillo deportivista con la reputación de ser un técnico que apuesta por un juego atractivo. A lo largo de su trayectoria ha destacado por adaptarse a los recursos con los que ha contado, pero por encima de todo su idea en el Deportivo es que el equipo sea atrayente para los aficionados. “En mi mente solo está intentar crear un equipo con el que el aficionado se sienta identificado, que cada vez que vaya a Riazor, independientemente del resultado, el equipo le resulte muy reconocible. Eso estamos buscando desde el principio, ya con los fichajes: gente con hambre. Vamos a querer un equipo muy valiente, atrevido, dominador y que sea divertido dentro de lo que la categoría te permite. Hay que tener el mayor tiempo posible la pelota y saber utilizarla bien”, resumió. “Lo que tengo en mente es que el aficionado se sienta identificado, que diga: ‘Este es el Deportivo que quiero”, insistió.

La presión. El nuevo técnico deportivista llega al club precedido de sus éxitos recientes, especialmente de los ascensos a Segunda División con el Mirandés y más recientemente con el Cartagena. Esos logros han sido a la vez el mejor aval para su contratación, pero negó que vayan a suponer una carga porque es consciente del objetivo que tiene entre manos. “Presión ninguna”, aseguró. “Cuando firmas en el Dépor sabes a lo que vienes, que es ascender. Los últimos años han sido muy positivos para mí en el aspecto personal de conseguir objetivos. La presión es la justa, la vida y la presión para mí son otras cosas; aquí se trata de hacer todo lo posible por devolver al Dépor a donde debe estar”, reflexionó.

Clave en la planificación. El club había reservado un papel protagonista a Rubén de la Barrera en la confección de la plantilla antes de que las negociaciones para su renovación se truncaran, pero esa idea se ha mantenido con Borja Jiménez. “Estoy siendo muy partícipe en todas las decisiones porque creemos que tiene que ser así, aportar nuestro granito”, razonó.

El perfil de los fichajes. El consenso entre el técnico y la dirección deportiva ha cristalizado hasta ahora en las incorporaciones de Ian Mackay, Juan Carlos Menudo, Diego Aguirre y Alberto Quiles. Todos comparten su conocimiento de la categoría y, sobre todo, su deseo de jugar en el Deportivo. “Cada uno tenemos nuestra forma de ver lo que puede aportar cada futbolista., pero dentro de todo ese análisis, del conocimiento del mercado de la secretaría técnica, intentamos traer a jugadores que quieran estar aquí con nosotros, con la misma ilusión y que conozcan la categoría”, argumentó Todavía faltan incorporaciones, aunque el entrenador blanquiazul no se atrevió a dar ninguna cifra y recomendó también paciencia porque el mercado será largo. “Ahora llamas a jugadores que te dicen que solo valoran Segunda y luego son ellos los que te llaman en agosto”, recordó. Jiménez admitió que ve “difícil” que el canterano deportivista Luis Fernández, con el que coincidió en Grecia, recale este verano en el equipo.

Las salidas de jugadores. El club tendrá que hacer hueco a las nuevas incorporaciones y ya le ha trasladado a cada uno de los futbolistas de la plantilla sus planes. A Celso Borges, Lucho García y Claudio Beauvue, por ejemplo, les ha comunicado que no entran en sus planes de futuro. “Siempre es mucho más fácil fichar jugadores que poder sacarlos. A cada jugador se le ha transmitido desde la secretaría técnica lo que vamos a intentar que sea su futuro. Cada situación nos va a llevar a un escenario diferente, pero el club está preparado. Nos queda un mes, muchísimo tiempo. Hay que tener paciencia, saber que algunas situaciones serán más fáciles de resolver y otras más largas”, expuso el técnico sobre los futbolistas que deberán dejar el equipo.

La cantera. Borja Jiménez también se detuvo en su papel dentro de la filosofía de cantera que pretende implantar el club en los próximos años. El técnico aseguró que las perlas del vivero de Abegondo, tendrán la puerta del primer equipo abierta, pero al mismo tiempo puntualizó que tendrán que ser conscientes de la dificultad que representa alcanzarlo. “Oportunidades tendrán”, garantizó. “Nosotros como entrenadores y también como club, les podemos dar la oportunidad de estar en el primer equipo, pero hay que hacer que el jugador de cantera valore lo que cuesta llegar. Tiene que ser complicado porque lo tienen que merecer. Soy un entrenador al que le gusta el jugador joven, de cantera, le vamos a dar la posibilidad y luego va a depender de ellos”, destacó. “Le daremos entrada al vestuario y serán ellos los que tengan que tirar la puerta abajo. Acelerar los procesos de jugadores puede llevarnos a acabar con ellos. Hay que poner en valor lo que supone jugar en el Deportivo, eso lo tienen que entender”, insistió el técnico sobre el papel de las categorías inferiores.

El inicio de la pretemporada, aún por decidir

El regreso a los entrenamientos de la plantilla deportivista y el inicio de la pretemporada están todavía por decidir, según manifestó ayer Borja Jiménez. El técnico indicó que la fecha dependerá del arranque de la competición, también en el aire hasta que lo decida la Federación. “Será en base al inicio de la competición, pero hay que esperar. No es lo mismo empezar a competir el 5 de septiembre que el 22 de agosto. A partir de esas fechas hay que configurar lo que sea mejor”, razonó el entrenador deportivista. La intención de Borja Jiménez y del cuerpo técnico, sin embargo, es “no alargar mucho tiempo el periodo vacacional”. El nuevo entrenador deportivista sí adelantó que habrá jugadores de la cantera que harán la pretemporada con el primer equipo en cuanto se conozca la fecha de inicio.