El Dépor ha querido mostrarse con mano firme en el mercado y ha cargado de excedente su plantilla, pero ha llegado el momento de tomar decisiones y aligerar y ayer llegó la segunda rescisión de contrato. De una portería sobrecargada de efectivos, se marcha Carlos Abad con la carta de libertad, a pesar del año de contrato que aún le quedaba con el equipo blanquiazul. Ambas partes llegaron a un acuerdo para finiquitar esa vinculación. Se convierte así en el segundo futbolista que deja el Dépor antes de tiempo y sin ser traspasado tras la salida de Nacho González. Con el interior uruguayo, el equipo coruñés activó una cláusula de lo firmado en 2020 que le permitía desprenderse de él y con el tinerfeño tuvo que llegar a un punto de entendimiento satisfactorio.

Carlos Abad llegó hace menos de un año como la gran apuesta de la portería de la secretaría de Richard Barral. Se había acabado la cesión de Jovanovic y Dani Giménez optaba por marcharse y el Dépor apostaba por un guardameta criado en el Tenerife, que nunca había podido asentarse en su equipo y que venía de un meritorio año en el Xanthi griego tras pasar por el Castilla y el Córdoba. Se desvinculaba de la entidad del Heliodoro Rodríguez y se presentaba con la vitola de titular. Fernando Vázquez le dio su confianza y, de hecho, jugó los nueve partidos que dirigió el técnico de Castrofeito esta temporada. Ya por entonces había quedado atrás una racha de cinco partidos sin encajar ni un gol y de siete duelos en los que había recogido tan solo dos balones de su portería. Esa seguridad que mostraba bajo palos, sustentada en un equipo que era una roca y que permitía contados tiros a puerta, se fue poco a poco desvaneciendo y, aunque Rubén de la Barrera le mantuvo al principio, acabó recurriendo a Lucho García en la décimo cuarta jornada ante el Guijüelo tras algún fallo de Abad ante el Coruxo en O Vao. Su última titularidad fue en el intrascendente duelo ante el Numancia en Los Pajaritos y volvió a dar muestras de inseguridad tras tres meses de ostracismo.

Quien acabó la liga como titular fue Lucho García y todo hacía indicar que sería esta temporada el dueño de la portería de Riazor, pero los planes de la secretaría técnica viraron ante la posibilidad que le surgió al Dépor de acceder a Ian Mackay, un meta veterano, de la casa y que viene de ser uno de los mejores de Segunda. Al colombiano, llegado el pasado verano de la cantera del Sevilla y que esta temporada dejaba de ser sub 23, se le comunicó hace semanas que debía buscar equipo. Desde entonces sus agentes trabajan buscándole nuevo destino bajo el escenario de un rescisión, a pesar de que tiene firmado hasta 2023. Debe ser el próximo en cerrar su salida entre los porteros deportivistas. Pablo Brea, este año en el Fabril y renovado hasta 2023, completará como sub 23 la apuesta para la portería.

Más acuerdos

Las salidas de Abad y Nacho no serán ni mucho menos las únicas entre el grueso de futbolistas que acaban en 2022, situación en la que el Dépor cuenta con cierta capacidad de negociación, más menguada con los de 2023 o 2024. Acaban, entre otros, su contrato con el Dépor en un año Beauvue, Borja Galán o Salva Ruiz, que no tienen clara su continuidad en A Coruña.