La afición regresó ayer a Riazor después de meses en los que las restricciones sanitarias impidieron que los aficionados accedieran al estadio en una cifra considerable. Ayer la grada estuvieron pobladas, pero aún así se mantuvieron las limitaciones de aforo. La Xunta permitió el 40% y el club repartió las entradas entre todos aquellos abonados que lo solicitaron. La de ayer fue así la mejor entrada a Riazor desde hace casi año y medio, cuando el Deportivo recibió al Lugo.