La plaga de lesiones en el Deportivo que se cebó con el puesto de lateral derecho —Trilli, Jorge Valín y Alberto Benito a la vez en la enfermería— empieza a solucionarse y a derivar hacia una situación de más normalidad. La primera buena noticia llegó el pasado sábado, con el alta médica que recibió el campeón de España juvenil. Entró en la convocatoria para recibir al Sanse en Riazor, aunque todavía no tuvo minutos. Ayer fue Valín quien dio un paso al frente al completar todas las tareas con el grupo en Abegondo por primera vez desde su lesión muscular en los aductores.

El coruñés no pudo hacer la pretemporada junto a sus compañeros debido a la operación de cadera a la que se sometió al término de la pasada campaña y, una vez reintegrado al grupo, tuvo que volver a parar debido a una lesión muscular. Ahora vuelve a ver la luz al final del túnel y ayer fue uno más a las órdenes de Borja Jiménez. Valín y el portero Pablo Brea son los únicos jugadores de la primera plantilla del Deportivo que aún no debutaron en esta campaña.

Más lenta marcha la recuperación de Benito, el otro lateral lesionado. El catalán continúa al margen del grupo y ayer realizó tareas sobre el césped enfocadas a tratar de superar sus molestias en la zona inguinal.

De cara al encuentro del domingo en Santander no parece que vaya a haber relevo en el lateral derecho, ya que Víctor García está cumpliendo con creces en las últimas jornadas actuando en esa demarcación, por la que ya formaron cinco jugadores diferentes en lo que va de temporada: Trilli, Benito, Lapeña, Villares y el propio Víctor. Jiménez todavía veía verde a Trilli para reaparecer el pasado fin de semana frente al Sanse, ya que salía de una lesión y llevaba muy pocas sesiones con el grupo. Lo normal es que el canterano repita en el banquillo en El Sardinero y que Víctor vuelva a ser el elegido para actuar como improvisado lateral derecho.