Borja Jiménez está pendiente de la evolución de Jaime Sánchez y Diego Aguirre para saber si podrá contar con ellos para el encuentro del domingo (17.00 horas) contra el Valladolid B en Riazor, una cita para la que son bajas seguras dos de los pilares de la defensa blanquiazul: Adrián Lapeña, sancionado tras ver la quinta tarjeta amarilla el pasado fin de semana en Ferrol; y Víctor García, que se ha afianzado como un lateral derecho de garantías pese a no ser su posición natural y cuyo contrato le impide enfrentarse al Valladolid, salvo que el Dépor haga frente a una contraprestación económica innecesaria teniendo en cuenta que están disponibles tres laterales derechos como son Trilli, Jorge Valín y Alberto Benito.

Lapeña y Víctor, titulares indiscutibles, son dos ausencias importantes que debilitan la retaguardia blanquiazul y obligarán a hacer cambios forzosos a Jiménez, cuyos problemas aumentarían si pierde a algún otro defensa. El central Jaime tuvo que abandonar el entrenamiento de ayer en Abegondo tras sufrir una contusión en una rodilla, mientras que el lateral Aguirre tampoco pudo completar el ensayo en la ciudad deportiva, en su caso por un golpe en un tobillo.

El percance que más preocupa es el de Jaime, que en caso de no poder competir frente al filial del Valladolid obligaría al técnico blanquiazul a renovar su pareja titular de centrales. Borja Granero y Pablo Trigueros son los candidatos para cubrir la baja de Lapeña, pero sin Jaime tendrían que jugar los dos desde el inicio, siempre y cuando Jiménez no opte por la solución de retrasar a Álex Bergantiños para que actúe de central, un rol que el capitán ya desempeñó con frecuencia en cursos pasados. De hecho, esta temporada el coruñés suele hacer de tercer central en ciertas fases de los partidos, bien para ayudar a iniciar las transiciones ofensivas de una forma más limpia generando una superioridad numérica, o en ocasiones para colaborar en las tareas de contención para conservar marcadores favorables.

Al margen de las dudas de Jaime y Aguirre, y de las bajas seguras de Lapeña y Víctor para el domingo, los demás jugadores de la plantilla están a disposición de Jiménez, que ayer en Abegondo organizó un partido de once contra once para avanzar en la preparación del duelo ante el Valladolid Promesas. El abulsense volvió a contar con varios canteranos a sus órdenes. A Yeremay, Trilli, Noel y Alberto, habituales con el primer equipo, se les unió ayer Lemos, portero del juvenil B blanquiazul que compite en Liga Nacional. El equipo coruñés vuelve a ejercitarse hoy y mañana en Abegondo antes de la sesión a puerta cerrada que está prevista para el sábado en el estadio de Riazor.