Las cinco temporadas que el portero Edu Sousa (Tui, 1991) pasó en la cantera del Deportivo, tres en categoría juvenil y dos en el Fabril, hacen que sienta un “cariño especial” hacia el conjunto coruñés, al que se enfrentará el domingo en Riazor con el Talavera. No llegó a debutar con el primer equipo blanquiazul, pero sí se ejercitó con la plantilla profesional a las órdenes de Miguel Ángel Lotina, primero, y José Luis Oltra, después, y con el lujo de tener a José Sambade como preparador de porteros y a compañeros bajo palos de la talla de Dani Aranzubia, Germán Lux, Fabricio Agosto o Ian Mackay, con quien también coincidió en Abegondo y con el que tiene una especial sintonía: “Nos tenemos mucho respeto y aprecio a la par”.

¿Qué recuerdos guarda de aquellas sesiones con el primer equipo del Deportivo?

Ya antes había ido a algún entrenamiento esporádico cuando hubo el problema de Munúa y Aouate y yo aún era juvenil. Luego, en la época del Fabril, durante esos dos años estuve entrenando en el primer equipo con Lotina y con Oltra. Estaban Aranzubia y Germán Lux, y luego también Manu Fernández. También Fabricio estaba ahí y compartí algún entrenamiento con él. El preparador de porteros era José Sambade. Tuve oportunidad de ir con ellos.

¿De quién aprendió más?

Sería injusto no decir que me quedo con un poquito de cada, pero incluso con los del Fabril, porque son porteros magníficos. Dani [Aranzubia] tenía un golpeo extraordinario y era muy ágil bajo palos. Manu era muy valiente. Poroto Lux tenía un buen toque de balón y mucha calma y frialdad. Puedo decir cosas de cada uno que he aprendido y que me he llevado en la mochila.

Mackay tuvo que llenar la suya de experiencias en otros clubes hasta cumplir su sueño de regresar al Deportivo. ¿Qué le parece su temporada?

No me sorprende que Ian esté en el Dépor y que esté rindiendo al nivel que lo está haciendo. Es capaz de hacer muy buenas paradas y muy buenas acciones, pero a lo mejor lo que la gente no sabe o no es consciente es que él es un tío que en el día a día trata de dejarse lo máximo. Es muy cabezón, muy tozudo para conseguir sus objetivos. Probablemente volver al Dépor y coger la portería de Riazor sería un objetivo que él tendría una vez que se marchó. Todos los que más o menos conocemos su trayectoria y su manera de ser y de trabajar, sabíamos que lo iba a hacer tarde o temprano. Y mira, está ahí, lo está haciendo francamente bien y no me sorprende porque en el día a día él se lo curra y lo trabaja para estar a este nivel. Coincidí en Abegondo con él y ahora mantenemos el contacto. Nos tenemos mucho respeto y aprecio a la par.

El domingo, en teoría, usted va a tener más trabajo que él.

Bueno, esperamos que sea un partido complicado, pero como a lo mejor lo son el 100% en esta categoría, porque en Primera RFEF todos los equipos a los que te enfrentas tienen cierto potencial. Evidentemente, el Dépor un poco más que el resto, porque es un trasatlántico y además cuenta con una afición que le respalda cantidad y con un estadio de otra categoría. Va a ser un partido supercomplicado para el Talavera y yo creo que para el Dépor también lo será.

¿Para usted va a ser especial visitar Riazor?

Es especial porque el Dépor es un equipo al que yo le tengo mucho cariño y aprecio. Tengo muy buenos recuerdos de mi época en A Coruña y guardo mucha relación y buena del club, con entrenadores, utilleros, compañeros… Eso hace que le tenga un cariño especial al Dépor.

¿Le desea lo mejor después del domingo?

Sí, yo al Dépor le deseo lo mejor siempre. Ojalá consiga sus objetivos. Evidentemente, el domingo vamos a ponérselo difícil porque nosotros queremos lo mismo que ellos, que es ganar. No obstante, el Dépor si va ahí es por méritos propios. Es un candidato a ascender, yo creo que el número uno, y si me apuras, de manera directa.

Pasó por las canteras de Celta, Atlético y Dépor antes de defender ocho años la portería del Pontevedra. Esta es su segunda campaña en el Talavera. ¿Contento?

Lo cierto es que salir del Pontevedra fue todo un hecho porque nadie contaba con ello y aquí me hicieron sentir unas cosas y valorar unas cosas que tuve que coger y venir a Talavera. Aquí estamos muy contentos mi familia y yo, nos respetan muchísimo y nos hacen sentir a gusto.

¿Cuál es el estilo del Talavera?

Aquí tratamos muy bien a las personas y el nivel emocional se tiene muy en cuenta. Que se pueda disfrutar, que se esté feliz y que se esté contento, eso es lo que nosotros primamos y valoramos mucho a la hora de hablar del equipo y del juego. Somos jugadores que nos gusta tener el balón, queremos tenerlo y no deshacernos de él fácilmente, y sobre todo disfrutar con lo que hacemos, porque si estás disfrutando, te van a salir mejor las cosas.