Diego Villares (Vilalba, 1996) parece que ha regresado de manera definitiva a la posición en el centro del campo desde la que se convirtió en uno de los jugadores imprescindibles de Borja Jiménez gracias a su recorrido y despliegue físico. Esas mismas cualidades las aprovechó el entrenador del Deportivo para utilizarlo como lateral derecho improvisado debido a las bajas de Víctor García y Trilli. El futbolista vilalbés repasa su rendimiento y la situación del equipo ante una inminente fase de ascenso.
¿Ya miran hacia el play off?
Hasta que las matemáticas digan lo contrario tenemos que pelearlo, y así va a ser, pero el objetivo parece que va a ser el play off y lo que tenemos que hacer es llegar lo mejor posible a esos partidos y encontrar nuestra mejor versión en este último tramo de liga.
¿Está costando volver a esa mejor versión? Lo consiguieron contra el DUX, pero el domingo en Talavera dieron otro paso atrás...
Nos está costando un poco más fuera de casa, pero también influyen los rivales. Cada partido tiene diferentes fases y además todos los equipos se están jugando mucho ahora.
¿Juegan condicionados fuera de casa por esa mala racha que arrastran a domicilio?
No sé si condicionados, pero nos falta esa confianza de ganar partidos fuera y encadenar victorias para poder salir más relajados. Esa victoria que nos está faltando nos hubiera podido ayudar. En la primera vuelta fuimos muy fiables, pero a partir del bache de resultados nos costó todo un poquito más. Además para la confianza no es lo mismo jugar en Riazor que fuera.
Fueron perdiendo confianza a medida que aumentaron los problemas futbolísticos, Álex dijo que dejaron de hacer aquello que mejor se les daba...
Hubo cosas que quizá dejamos de hacer y que nos llevó a ser más previsibles para los rivales o a tener un juego más plano. Eso nos condicionó. No creo que fuera algo solo ofensivo o defensivo, las dos se notaron.
¿Han tenido que convencerse de que son el mismo equipo de la primera vuelta?
Es un tema de vestuario, de volver a creer en nosotros mismos y en nuestras posibilidades. Somos el mismo equipo que hicimos esa primera vuelta increíble y cada uno tiene que volver a su mejor versión para que lo note el equipo.
La segunda vuelta del Deportivo no ha sido buena, pero es que la del Racing de Santander está por encima de cualquier expectativa...
Llevan una racha increíble. Nosotros no estuvimos bien, pero es que el Racing no nos dio ninguna opción a tener un fallo.
Aunque hubieran repetido los 43 puntos de la primera vuelta no les daría para alcanzarlos al ritmo que llevan...
Parece que solo saben ganar y eso nos puso las cosas mucho más difíciles.
La famosa confianza que menciona...
Eso es. Si te ves un poco más cerca siempre ayuda un poco más. Al final, aunque no quieras, siempre acabas mirando la clasificación y eso te ayuda o te perjudica. Por mucho que te quieras centrar en tu trabajo y en tus partidos siempre la acabas mirando. Muchas veces eso te viene a la cabeza.
A falta de ese play off, ¿de qué manera se ve la temporada?
Visto desde la perspectiva de que éramos líderes y estábamos convenciendo, se puede ver un poco peor, pero creo que lo tenemos en nuestra mano. Este año existe esa posibilidad de ascender directo, pero el resto de años siempre era por play off. Es lo que nos queda y es lo que vamos a pelear para conseguirlo.
¿Ayudará que sea en casa como parece?
Prefiero jugarlo aquí [en Galicia] que en otro sitio. Si puede ser en Riazor, mucho mejor. Nunca se sabe lo que puede pasar, pero ya se ve que nuestros partidos en casa son distintos. Eso en el play off podría ayudar.
Insiste en llegar de la mejor manera posible a ese play off, ¿es determinante eso o ahí se igualaría un poco todo?
Puede pasar de todo porque son dos partidos, pero la dinámica que traigas de atrás influye para afrontarlos. Por ejemplo el Badajoz el año pasado fue líder toda la temporada y al final no lo consiguió. O el Rayo Vallecano en Segunda División, que se metió en las últimas jornadas y al final ascendió. No influye al cien por cien cómo llegues, pero ayuda bastante. Sobre todo tienes que llegar con la cabeza despejada y con confianza.
El sábado contra la UD Logroñés tienen otro partido exigente, ¿siente que ahora cada jornada es un examen?
No sientes la presión de que sea un examen, pero es cierto que cada domingo es un prueba. Al final estás en el Deportivo y hay una exigencia de ganar todos los fines de semana. Hacer un buen partido ayudaría para las sensaciones.
¿Les empieza a extrañar que la Federación no se haya pronunciado todavía sobre la reclamación por alineación indebida del Bilbao Athletic?
Esperábamos que fuera la semana pasada y no fue... Esta semana a ver qué dicen. Intentas no hablar mucho de eso. A ver si se puede resolver de una vez y que sea a nuestro favor.
En Talavera volvió de manera definitiva al centro del campo y ya lo había hecho contra el DUX, ¿cómo fueron estas últimas semanas en el lateral derecho?
Había jugado a cuentagotas ahí y lo que intentas es adaptarte. Es difícil, porque no estás acostumbrado y te puede tocar un extremo habilidoso que te haga sufrir. Lamentablemente, por las circunstancias de algún compañero, nos tocó hacer algún apaño, pero ahora parece que Antoñito está bien y Trilli también está en la recta final de su recuperación.
¿Por qué cree que lo escogió a usted Borja Jiménez para esa posición?
Puede que por ese ida y vuelta que puedo tener yo y que no ve en otro centrocampista o porque tampoco quería poner a un extremo como hizo con Víctor [García] en su día. Quizá vio que podía ayudarle defensivamente por ese rigor táctico. En ataque no tengo el desborde que puede tener otro, pero acabo llegando.
¿Está satisfecho por cómo lo ha hecho de lateral?
No puedo decir que haya sido un lateral de primera, pero intenté cumplir lo mejor que pude. Por mi parte me queda el alivio de que lo hice lo mejor posible y que lo di todo.
