El Deportivo Abanca se despidió el sábado de sus opciones de ascenso tras perder contra el Espanyol (1-2) en la ciudad deportiva de Abegondo y ayer el resto de resultados de la jornada enviaron al equipo a las posiciones que obligan a disputar el play off por la permanencia la temporada que viene en la segunda división. El conjunto blanquiazul tiene ya prácticamente imposible regresar a la máxima categoría y ahora deberá centrarse en evitar disputar la promoción por la permanencia.
El Dépor Abanca ocupa actualmente la sexta plaza con 46 puntos, a uno del Barcelona B, que es quinto y marca la frontera con la zona que tiene asegurada el curso que viene la permanencia, y a seis del liderato cuando faltan por disputar tan solo cuatro jornadas.
El equipo que dirige Miguel Llorente depende de sí mismo para acabar al menos entre las cinco primeros y evitar disputar ese play off por la permanencia porque tiene un duelo directo contra el DUX Logroño en la ciudad deportiva de Abegondo, pero se encuentra inmerso en una grave crisis de juego y resultados.
El Deportivo Abanca tan solo ha sumado dos victorias en los últimos once partidos y ha atravesado problemas internos con el expediente abierto hace unas semanas al entrenador.
