Un delantero y algo más. El Dépor aceleró la planificación en el ecuador del mercado y ahora se le están complicando las últimas pinceladas a falta de dos semanas para que empiece la liga. El club aspira a lo máximo y el mercado requiere cada día mayores esfuerzos económicos. Borja Jiménez entiende todos los atenuantes, pero espera incorporar “por los menos a dos jugadores más” antes de que se baje la persiana de la compraventa de jugadores. “Quedan días, pero una semana menos que la pasada. El tiempo se va acabando, se acerca el inicio. Nos faltan jugadores y se está trabajando. Nos gustaría tener a todos desde el primer día, pero hay que adaptarse a las circunstancias. Va mas lento este año (el mercado) para nosotros y estamos esperando buenas opciones. Quedan por incorporarse por lo menos dos jugadores. Con Lucas ha cambiado poco”, apunta sobre el coruñés y sobre lo que anhela que le traiga la secretaría técnica. Sabe que deberá armarse de paciencia y más con algún caso en concreto. “¿Esperar por Lucas? Es más una pregunta para el club y la dirección deportiva. Necesitamos un delantero con los riesgos que conlleva esperar hasta el final o no. Hay que ir viendo los tiempos del mercado”, amplía.

Fue el técnico más críptico al poner el dedo sobre las posiciones a reforzar, además de la punta de ataque. Eso sí, dijo en varias ocasiones: “Sabemos las necesidades todos, las vemos todos”. No quiso dar pistas, pero las principales opciones son un jugador para la banda izquierda y otro para el puesto de central, más con una eventual salida de Granero entre las posibilidades para lo que queda de mes. Es consciente de que no solo se incorporarán jugadores en los días que quedan. “Habrá entradas y salidas. Trabaja la dirección deportiva y estoy al margen. Sabemos las necesidades y hay que tener la misma paciencia que hasta ahora. Buscamos jugadores que aporten. No, temor no (por alguna salida). Al final hay situaciones habladas, que me pueden gustar más o menos, no es que haya ninguna salida extraña. Y es normal que en entradas o salidas estemos más o menos de acuerdo (con la dirección deportiva). Tengo que hacer mi trabajo, que es por lo que se me evalúa. Podemos ir de la mano en casi todas las cosas, pero si hiciese también de director deportivo, no me daría la vida. Me centro en entrenar y sacar rendimiento a lo que me ponen en el verde”, expone.

El Deportivo peina el mercado y él también rebusca en su plantilla. Álex Bergantiños ya estuvo en algún amistoso en el centro de la zaga, probó a Lapeña y Jaime cambiados de posición y recupera, de momento, a Borja Granero. A quien no ve jugando en esa zona es a Retuerta. “No me planteo utilizarlo como central porque es lateral. Es donde más ha jugado y más cómodo se encuentra. Otra cosa es que se pueda usar puntual por alguna circunstancia. Es un lateral con buen trato de balón, un chico joven. Ha estado durante años en una cantera con lo que eso conlleva de competir y de tener talento. Tiene una buena predisposición al trabajo y cuando se incorpora al ataque, lo hace bien, pero debemos ajustar algunas cuestiones”, concede sobre el ex del Real Madrid Castilla.

“Jugará el que se lo gane”, dice de la base

El final de temporada de Yeremay podía invitar a pensar que su rol iba a cambiar en el equipo para este ejercicio. Finalmente, no tendrá ficha del primer equipo y ya está jugando amistosos con el Fabril. Para Borja nada cambia respecto a su filosofía en la gestión del salto de los canteranos al primer equipo. “Jugará el que se lo gane. Él, Barcia, Mella o Jairo. Yo considero que el premio es entrenar con nosotros y estamos encantados con lo que nos aportan. Luego deben ganárselo, como Víctor Narro, como cualquiera”, dice.

Confianza en Soriano y Rubén Díez e inquietud por Villares

No solo mira a la defensa, Borja también tiene sus ojos en armar el equipo unos metros por delante. Para esa posición de banda en la que puede haber algún déficit y para completar el puzle en la media cuenta también con la versatilidad del binomio Mario Soriano-Rubén Díez. Ambos pueden jugar por dentro y caer a banda izquierda. “Es posible que sean futbolistas de características parecidas. Rubén es más cercano a los pivotes, aunque también jugó por fuera. Los jugadores talentosos encajan bien. Mario ya pudimos comprobar lo que aporta y el sentido del juego que tiene y lo involucrado que está con el club y con el cuerpo técnico. Son dos buenos futbolistas”, sentencia de sus opciones primordiales para la mediapunta, una posición que piensa recuperar en sus esquemas para esta temporada tras jugar casi todo el ejercicio pasado con interiores. El parte de bajas de cara al Teresa Herrera y al inicio de liga es, en estos momentos, otra fuente de preocupación. La recaída de Diego Villares le hizo torcer el gesto porque cae por un problema recurrente en su rodilla. Poca luz pudo arrojar al respecto. “No puedo contar mucho porque no sé de medicina. La resonancia dice que en un golpeo se hizo daño donde se había hecho daño en el play off. Villares es bastante animal y esperemos que llegue, pero es más esperanza que realidad lo que digo”, reconoce el técnico. Son bajas para el sábado Raúl Carnero e Ibai Gómez, aunque a ambos espera tenerlos entrenándose con el grupo la próxima semana. Quien puede regresar en el Teresa Herrera es Trilli, aunque el técnico admite que aún le queda camino por recorrer tras la operación y tras estar tantos meses parado. “A ver cómo se encuentra de aquí al sábado, pero espero que participe, aunque sea de manera anecdótica, para que se sienta futbolista. Nota fatiga, le cuestan asimilar las cargas”, cuenta del futbolista de Ortigueira, de 19 años.