Todo se ve diferente, menos oscuro, viniendo de ganar y con el liderato a cinco puntos después de un inicio de temporada tan decepcionante, pero las cuentas del Deportivo para subirse a tiempo al tren del ascenso pasan por sumar de tres en tres también a domicilio, no solo en Riazor. Solo una victoria como visitante celebró el equipo coruñés en la presente temporada, la de la segunda jornada en Mérida, donde Raúl García resolvió con su potente zapatazo. Era el 11 de septiembre. Mucho tiempo sin volver a ganar fuera, casi dos meses largos. Al Dépor le urge ser fiable también como visitante y esta tarde, en el Nuevo Mirador de Algeciras, tiene la oportunidad de marcar un punto de inflexión con un triunfo necesario para auparse de nuevo a la zona de play off y acercarse a la cabeza.
El examen a domicilio es de los duros para el Deportivo, que visita uno campo de los más complicados de la categoría, donde solo un equipo, la Cultural Leonesa, ha ganado en la presente campaña (0-1). Ni siquiera el colíder, el Racing de Ferrol, fue capaz de vencer a domicilio al conjunto albirrojo (1-1), que para recibir al Dépor pierde por sanción a su futbolista más determinante, el delantero Álvaro Romero, autor nada más y nada menos que de siete goles esta temporada.
Su técnico, Iván Ania, reconstruirá el ataque en busca de un triunfo de prestigio para igualar a puntos con el equipo coruñés. El Algeciras juega bastante directo y mete muchos balones al área mediante centros laterales. Al Dépor le suele costar bastante defender ese tipo de acciones, así que tendrá que estar especialmente atento y concentrado para no verse sorprendido.
En el bando blanquiazul Óscar Cano tiene las bajas por lesión de Borja Granero e Isi Gómez, quien fue titular el pasado fin de semana frente al Sanse. Olabe apunta a regresar al once en sustitución del centrocampista madrileño, que está teniendo muy mala suerte con los problemas musculares desde su llegada a A Coruña.
También Trilli ha pasado demasiado tiempo en la enfermería, pero ya acumula los suficientes entrenamientos como para volver a competir desde el inicio. Cano medita darle una oportunidad y sentar a Antoñito, muy profundo y con pulmones de sobra como para ganar con frecuencia la línea de fondo, pero últimamente demasiado impreciso a la hora de centrar. La otra duda está en el eje de la defensa. Vuelve Lapeña tras sanción, pero Jaime y Martínez formaron un dúo muy fiable ante el Sanse, así que tienen bastantes opciones de repetir esta tarde en el Nuevo Mirador, donde el Deportivo buscará su segundo triunfo consecutivo para marcar tendencia y poner la flecha aún más hacia arriba.
