El Dépor busca consuelo en Riazor

El Dépor de las dos versiones, una sobresaliente en casa y otra muy deficiente a domicilio, regresa esta tarde a Riazor en busca de consuelo tras el duro golpe recibido en San Fernando, otro más como visitante. Allí dejó escapar dos puntos a última hora, un tesoro que le hubiera dejado en disposición de asaltar el liderato esta misma jornada. Dolió mucho, por el momento y sobre todo porque el 2-2 era perfectamente evitable, pero el equipo coruñés no tiene más remedio que levantarse para seguir cuadrando las cuentas del ascenso directo. En Riazor le salen. Hoy busca la cuarta victoria ante su público, que además de ovacionar a Álex Bergantiños antes del partido por haber entrado en el top 10 histórico del Dépor, también tendrá la oportunidad de ver en acción por primera vez a tres de los nuevos fichajes: Lebedenko, Saverio y Pepe Sánchez. Los dos primeros, que ya fueron titulares el pasado fin de semana, son los que más opciones tienen de formar desde el inicio ante un Mérida que llega en un momento delicado tras haber encadenado cuatro derrotas y que en enero fichó a Chuma, Dani Lorenzo, Ben Hamed, Diego y De la Víbora, baja para hoy por lesión. El joven Larrubia, habilidoso extremo, es su futbolista más talentoso.

El Dépor rescata su ‘caña’ invernal

En la primera vuelta el Dépor ya ganó al conjunto extremeño, pero sin merecerlo, gracias a un zapatazo lejano de Raúl Carnero. Hoy necesitará proponer bastante más, como suele hacer en Riazor, para volver a embolsarse tres puntos imprescindibles en su carrera por el ascenso directo. El lateral coruñés sigue de baja por lesión. Tampoco podrá competir el recién llegado Arturo Rodríguez, que arrastra una sanción por acumulación de amarillas de su anterior etapa en el Sanse. Los demás, todos listos, incluidos Max Svensson, que regresa tras cumplir un encuentro de castigo por cinco tarjetas, e Isi Gómez, en condiciones de reaparecer tras la fractura en el tercer dedo de la mano derecha que sufrió ante el Rayo Majadahonda, un encuentro que el Dépor acabó sacando adelante con bastante sufrimiento gracias al gol de Lucas en el minuto 78 después de desperdiciar muchas ocasiones claras en la primera parte.

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Hoy volverá a llevar la iniciativa y a dominar la posesión con el objetivo de vivir permanentemente en campo contrario y generar llegadas constantes al área. Es su seña de identidad en Riazor. Fuera, en cambio, es otra historia. Al Dépor le toca abrir la jornada y, si gana, metería presión a sus rivales más directos. Castilla y Alcorcón se enfrentan mañana entre ellos a las 12.00, la misma hora en la que el Córdoba visitará el campo de Unionistas. Primero, ganar al Mérida; y luego, esperar a ver qué hacen los rivales. Por ese orden.

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