Escudero, en vilo de nuevo por el codo izquierdo

El codo izquierdo no da respiro a Sergio Escudero, que esta mañana ha tenido que abandonar el entrenamiento visiblemente afectado por un golpe en la articulación que ya se lesionó en pretemporada y que se ha convertido en un quebradero de cabeza para él en los últimos años.

El defensa tuvo que abandonar la última sesión previa al partido de mañana en Málaga (18.30 horas) debido a un golpe durante uno de los ejercicios. Escudero se quedó tumbado sobre el césped rodeado de varios de sus compañeros antes de sentarse en uno de los banquillos para ser explorado por los médicos. Minutos después abandonaba los campos de entrenamiento de Abegondo visiblemente afectado y sujetándose la articulación con su brazo derecho, en compañía de uno de los fisioterapeutas y a la espera de exploración médica, según indicó el club.

El codo izquierdo se ha convertido en un calvario para el defensa. Esta pretemporada, en el partido amistoso contra el Chaves en Portugal sufrió una luxación en la misma articulación por la que ya había tenido que ser operado previamente. Escudero estuvo alrededor de dos meses de baja antes de poder jugar con regularidad con el Deportivo. Los problemas para el jugador en el codo izquierdo se agravaron en 2020, cuando tuvo que ser intervenido quirúrgicamente por una luxación. Ya antes en 2018 había sufrido una lesión similar.

La lesión reapareció este verano en sus primeras semanas en el Deportivo y ahora le inquieta de nuevo a la espera de que los servicios médicos determinen el alcance de esos problemas.

En función de la gravedad, el jugador podría estar de baja un periodo parecido al que ya condicionó sus primeros meses en el Deportivo. Lo más probable es que mañana en Málaga sea Obrador el que ocupe el lateral izquierdo a la espera de conocer el alcance real del percance sufrido ayer por Escudero. La gravedad del problema del defensa podría incluso determinar algún movimiento del club en este mercado de enero.

Gilsanz: "Siempre tenemos que estar pendientes de mejorar al equipo”

El incidente del jugador pucelano fue la nota negativa de una sesión que también vivió otro susto en el tramo final. Iván Barbero tampoco pudo acabar el entrenamiento y se retiró hacia los vestuarios en uno de los últimos ejercicios preparados por Óscar Gilsanz debido a unas molestias. El delantero es duda y compromete también la alineación para el técnico en una posición que ofrecía pocas incógnitas. Barbero se perfilaba como titular para un partido en el que la única baja prevista era la de Villares por sanción y que ahora acumula varias dudas más.

Gilsanz al menos pudo despejar las de Lucas Pérez y David Mella, que a lo largo de la semana se tuvieron que ejercitar a menor ritmo que el resto de sus compañeros. El técnico indicó que el capitán atravesó por un proceso vírico, pero que estará disponible para el encuentro en La Rosaleda. El canterano arrastró molestias por un golpe en un tobillo, pero Gilsanz también cuenta con él para enfrentarse al Málaga.

El entrenador deportivista recupera a Dani Barcia, que entrará en la convocatoria, pero tiene pocas posibilidades de ser titular después de alrededor de dos meses lesionado debido a un problema muscular. «Su último partido fue en Almería. Después de estas semanas de recuperación, lesión muscular... lleva entrenando desde el martes, está para ser convocado. Evidentemente, veremos para cuántos minutos», indicó Gilsanz.