0-2 | El Fabril se choca contra un muro

El Fabril cayó derrotado ante un Numancia que pasó gran parte de la segunda mitad con un jugador menos. Para entonces la distancia ya era insalvable ante una escuadra que fue una roca inquebrantable.

Con la lección aprendida después de la victoria del Fabril ante el Pontevedra, el cuadro numantino aprisionó al equipo de Manuel Pablo en un inicio muy intenso que puso contra las cuerdas al filial coruñés. Los blanquiazules tardaron 17 minutos en lograr salir de la presión alta rival y del juego directo que les hundía en su campo, sin capacidad para contestar, guardarse el balón o correr.

Manuel Pablo corrigió la salida de pelota tras el primer cuarto de hora. Sumó a un jugador más entre centrales (Garrido habitualmente) y lanzó más largo a los laterales. Poco a poco creció el filial, que, camino de la media hora, tuvo la más clara en un contragolpe. Fabi pudo poner por delante a su equipo, pero tras una carrera de campo a campo y driblar a un último defensor en el área rival, se le hizo de noche y no remató.

Al filo del descanso y cuando mejor estaba el Fabril, el Numancia puso el 0-1 a balón parado. Tras un primer rebote, Mendibe sacó una chilena que repelió Alberto, pero la pelota quedó suelta y la cazó Dieste, delantero rival.

El partido se rompió nada más arrancar la segunda parte. Dieste otra vez remató un córner perfecto de Bonilla para poner el 0-2, aunque en posible posición adelantada tras la peinada de un jugador en el primer palo. Poco después, el Numancia se quedó con uno menos por la expulsión de David Sainz, que vio la roja directa tras una dura entrada sobre Fabi.

Con uno más el Fabril tuvo la posesión, pero se chocó de frente contra una pared. Con uno menos el cuadro soriano ralentizó el juego, se hizo fuerte en área propia y desesperó al filial y a la grada. Ya en los minutos finales, Bil Nsongo tuvo un remate alto en boca de gol; poco después, bajo palos y de manera milagrosa, Bonilla evitó con la cabeza y ayuda del larguero un gol de Fabi tras un testarazo que había logrado superar al cancerbero visitante. No hubo forma.