Así fue el fichaje por el Deportivo de Helton Leite, un portero caído del cielo

Entre las pocas unanimidades que suele generar el Deportivo entre su gente, una de ellas es que Helton Leite se ha convertido en el fichaje de la temporada. Poca responsabilidad tuvo en la derrota en Elda, aunque cada semana deja una buena mano y esa, esta vez, fue a un disparo de Víctor García en la primera parte. Por esta atajada y muchas otras el brasileño es inamovible bajo palos y un referente. Un portero que estaba fuera del mercado blanquiazul, pero que acabó llegando a A Coruña por una serie de circunstancias y por una fuerte apuesta tanto personal como del propio club coruñés.

El Deportivo acabó anunciado el acuerdo por dos temporadas con Helton Leite el pasado 12 de agosto. La llegada de un portero titular era una de las grandes preocupaciones de la planificación en el regreso a Segunda División. El club coruñés no se podía permitir vacilaciones en una posición sensible y acabó atando al brasileño en una operación relámpago. Meses antes, Helton Leite había decidido rechazar una oferta de renovación mareante del Antalyaspor tras ser uno de los mejores porteros del campeonato turco y que, de haberla aceptado, le habría llevado prácticamente a cerrar su carrera en el balompié otomano. Más allá de las buenas condiciones deportivas y de vida que le ofrecían en Antalya, Leite pretendía y buscaba otros contextos para su familia y también para reconducir su carrera. En ese sentido, también rechazó una propuesta del fútbol saudí con la idea de encontrar acomodo en España o en Italia.

Helton Leite estuvo durante semanas a la espera de que encontrasen espacio en sus límites salariales y en sus plantillas algunos de los equipos de Primera División que le habían transmitido su interés, que deseaban contar con él esta temporada. Llegado el ecuador de agosto y cuando el inicio de liga ya asomaba, el guardameta blanquiazul decidió no esperar más y no enredarse en un final de mercado que podría generar inestabilidad en su carrera y en su entorno. Sus agentes se movieron. Le abrieron la puerta al Dépor y a la Segunda División y la operación quedó finiquitada casi de manera inmediata. El trato tuvo una velocidad más propia del cierre de mercado que de mediados de agosto.

Breve suplencia

Aterrizó en A Coruña Helton Leite unos días antes del comienzo de liga y, aunque no llegaba en forma después de un verano de entrenamientos en solitario, sus condiciones no ofrecieron ni la más mínima duda desde las primeras sesiones de entrenamiento en Abegondo. Por higiene de vestuario y por condición física, Germán Parreño disputó las dos primeras jornadas de liga ante Oviedo y Huesca. En cuanto pudo y lo vio en condiciones, Idiakez le dio la alternativa frente al Racing y hasta hoy. Tanto él como Óscar Gilsanz le han convertido en fijo. Salvo el desgraciado duelo ante el Levante, ha figurado semana a semana como uno de esos guardametas que da puntos y seguridades a un equipo que han navegado gran parte de la temporada en las aguas turbulentas de la lucha por el descenso a Primera RFEF.

El brasileño ha encontrado el entorno futbolístico y personal ideal para relanzar sus últimos años al más alto nivel. Dio un paso al lado al irse a Turquía después de llegar al Benfica desde el Boavista. En A Luz jugó menos de lo que hubiese deseado, aunque en la temporada de la pandemia le acabó peleando el puesto a Vlachodimos. En unos meses cumplirá 35 años, tiene una campaña más de contrato con el Dépor y se ve con fuerzas para superar de manera holgada la longevidad de su padre, João Leite, internacional brasileño, quien estuvo al máximo nivel en la portería hasta los 37 en el fútbol de su país. El Dépor quiere acompañarle en sus últimos pasos.