El Dépor se choca con otra tarde aciaga de videoarbitraje

El Deportivo volvió a chocarse de frente con las decisiones arbitrales y, más en concreto, con la actuación desde la sala VOR, comandada por Saúl Ais Reig, y desde donde se pidió al colegiado principal Muresan Muresan revisar dos penaltis de Pablo Martínez, pero no una durísima entrada de Butzke sobre Pablo Vázquez con la plancha alta. En el descuento, Eddahchouri forzó una tercera pena máxima, esta vez en favor de los blanquiazules y que sirvió para empatar la contienda.

El Deportivo tiene una vez más motivos para alzar la voz. Hasta ahora no lo ha hecho, al menos de manera pública. Con 0-1 a favor, tras una disputa de balón entre Pablo Martínez y Panichelli en la que el francés eleva la pierna y contacta con la del punta jabato, Muresan Muresan, a petición de la sala VOR, revisó la acción para rearbitrar una jugada en la que inicialmente no había señalado nada. La repetición genera dudas, la pierna del atacante no se mueve en ningún momento. El VAR, como se aclamó desde el primer día, no llegó para juzgar y corregir intensidades en los contactos.

El Dépor fue superior en la primera parte y muy inferior en la segunda. No supo corregir la posición de Joel Roca ni el peligro desde segunda línea de Butzke. Lisci cambió el duelo, aunque fue una polémica mano de Pablo Martínez la que permitió al Mirandés adelantarse en el marcador. De nuevo, tras una revisión. El contacto es claro y la posición, antinatural.

No hizo falta corregir a Muresan Muresan, que acertó con el tirón sobre la camiseta de Zakaria Eddahchouri. No obstante, en el minuto 76, Butzke hizo una entrada con los tacos a Vázquez que el colegiado castigó con amarilla y en otros campos ha sido de expulsión.