Yeremay cumple su promesa de goles antes de un verano de locura en el mercado: la cláusula y la postura del Dépor

Yeremay siempre ha sido un futbolista de último pase, un engañador, un facilitador de tantos... hasta esta temporada. El canario, en su salto al fútbol profesional, sabía que ese paso adelante que le convertiría en un futbolista de otra dimensión era convertirse en un goleador. Ni en su formación ni en el Fabril ni en sus primeros años en el Dépor, aún en Primera RFEF, destacó en esta suerte, pero esta temporada se propuso cambiar. Ya lo había hecho en otras facetas de su vida y de sus hábitos como futbolista profesional, y mirar a portería no iba a ser una excepción. El gran inicio de temporada le animó y en su mente apareció esa cifra de 14 goles. Se la prometió a quien le rodeaba y la verbalizó en alguna de sus comparecencias públicas. Dicho y hecho. Ha cumplido tras ese doblete ante el Albacete y ahora tiene un mes para romper barreras en la categoría y en la historia del Dépor. Ya tiene a Andrés Martín, el centrocampista más goleador de Segunda División, a un gol y a Yeremay nunca le llega.

Esta eclosión llega justo antes de un verano que promete movimiento y en el que existen muchas opciones de que el 10 acabe dejando el Dépor, a pesar de que tiene contrato hasta 2030. Ya hubo un fuerte interés el pasado mes de enero y la oferta de mayor cuantía que llegó a la Plaza de Pontevedra fue una que presentó el Como italiano por 14 millones. Tras la salida de Lucas, el Dépor hizo una fuerte apuesta económica para acabar con la incertidumbre. Aprovechó el espacio salarial del coruñés para mejorar su contrato para reconocer su importancia en el equipo y que se quedase, al menos, hasta junio. Sin él, peligraba incluso la categoría. De manera paralela, subía su cláusula de rescisión que, aún en Segunda División, se colocaba en torno a 35 millones.

El Deportivo, antes de revisarle el contrato, se remitió el pasado mes de enero a su cláusula de rescisión de 20 millones para ahuyentar a todos los pretendientes. Ejerció una indudable posición de fuerza que tuvo sus réditos. Su idea ahora es seguir en la misma línea, salvo que el jugador muestre su firme deseo de marcharse, entonces el panorama cambiaría. El Dépor, saneado y con dinero en caja, solo tiene preocupaciones deportivas y nada mejor que contar con Yeremay para poder subir a Primera. Eso sí, debe calibrar porque perderlo a final de mercado, aunque sea por más dinero, le dejaría con menos opciones para encontrar sustitutos.

La segunda vuelta del canario no ha frenado ni muchos menos el interés de los equipos que le rodaron en el mercado de enero, alguno más se han sumado. En su momento eran, además del Como, Bologna, Atalanta y Parma los interesados en Italia; Newcastle, Chelsea, Arsenal, Nottingham Forest, Bournemouth, Manchester United y Brentford los que le seguían la pista en Inglaterra, además de equipos españoles y de Red Bull Leipzig y Borussia Dortmund en Alemania y Niza, Lens, Olympique de Marsella y Estrasburgo, en Francia. La lista de pretendientes es larga, aunque eso sí, todos deberán venir con dinero y con unas grandes dotes de persuasión para convencer al Dépor y al jugador de que es el momento de cambiar de aires. Riazor lo disfruta, mientras tanto, con un punto de resignación.