Óscar Gilsanz no continuará ligado al Deportivo y se despedirá este jueves

Leerá un comunicado, sin preguntas, y no acepta el cargo en la escuela de entrenadores del club

Óscar Gilsanz da instrucciones desde la banda de Riazor. |  Casteleiro / Roller Agencia

Óscar Gilsanz da instrucciones desde la banda de Riazor. | Casteleiro / Roller Agencia

Óscar Gilsanz no continuará en la estructura del Deportivo y apuesta por continuar su carrera como entrenador. El club ha hecho oficial la salida del técnico betanceiro, que se despedirá este jueves en Abegondo y leerá un comunicado. No habrá preguntas. El conjunto coruñés le habría ofrecido el puesto de coordinador de la escuela de entrenadores y proyectos formativos externos, que finalmente no acepta.

El betanceiro se despide así de la disciplina blanquiazul, a la que llegó hace cinco años y en la que ha hecho historia con la cantera, logrando una Copa de Campeones juvenil y un ascenso a Segunda RFEF, así como dar el paso al primer equipo de manera interina, logrando mantenerse siete meses en el cargo con 30 partidos a su espalda.

Siete meses en el cargo

Óscar Gilsanz asumió el mando del primer equipo con la perspectiva de conducirlo durante apenas unos entrenamientos. Ante la falta de acuerdo con otros candidatos, la experiencia se alargó durante siete meses y 30 encuentros.

El betanceiro debutó en Cartagonova con una goleada (1-5) a costa del Cartagena, a la postre, colista de la competición, y dejó una muy buena impresión del equipo, permitiendo alargar unos días más su estadía hasta que finalmente el conjunto blanquiazul anunció que continuaría hasta final de temporada, quedándose de manera definitiva con el puesto. Su ascenso propició un movimiento en cadena en la base: Manuel Pablo subió al Fabril y Miguel Figueira se hizo cargo del banquillo del Juvenil A. Ambos seguirán en esos cargos. 

Cuando se estrenó en el banquillo, el Deportivo era el vigésimo clasificado, en puestos de descenso tras 12 jornadas en las que apenas había sumado diez puntos de 36 posibles. El equipo despegó con cuatro victorias antes de Navidad y logró salir de la zona roja para no volver a pisarla en el resto de la temporada. Once victorias, diez empates y nueve derrotas después, a las que se suma una más ante el Ourense CF en la Copa del Rey, redondean la etapa de Óscar Gilsanz en el banquillo deportivista. Sumó 43 puntos, 1,43 por partido, y el equipo anotó 45 goles y encajó 39 en contra. Las cifras, sin embargo, se vieron empañadas en el tramo final de la liga, con el objetivo de la salvación ya en el bolsillo y cuatro derrotas consecutivas para cerrar el curso. 

Tracking Pixel Contents