La caída del IPC dejará a un 17% de los empleados gallegos sin revisión salarial

Un 17% de los asalariados gallegos se quedarán este año sin la paga de atrasos, la compensación que el 90% de los trabajadores -según las estimaciones de los sindicatos- tienen reconocida en sus convenios colectivos para compensar el incremento de los precios registrado a lo largo del año.

La caída del Índice de Precios al Consumo (IPC) hasta el 1,5% en diciembre desactivará la cláusula de revisión salarial para unos 160.000 trabajadores, un 12% de la población activa gallega y un 17% de los asalariados que existen en Galicia, si el próximo día 15 se confirma el indicador que el Instituto Nacional de Estadística (INE) adelantó el pasado lunes y que se sitúa medio punto por debajo de la previsión del Gobierno para 2008.

La mayoría de los convenios laborales toman como referencia para el incremento salarial el IPC que el Gobierno prevé para el año entrante e incorporan una cláusula de revisión salarial para compensar las desviaciones del índice real sobre esta previsión. Aunque la inflación ha sufrido importantes incrementos a lo largo del año, hasta alcanzar el 5% en junio, la caída del precio del petróleo registrada en los últimos meses de 2008 ha provocado un fulgurante descenso del IPC por debajo de la previsión del Gobierno.

Los sindicatos calculan que al menos 221.000 asalariados gallegos tienen reconocida la cláusula de revisión salarial, aunque no todas las empresas manejan la misma previsión. Es por esto que el secretario de Emprego de Comisiones Obreras de Galicia, Eusebio Justo Santos, calcula que entre 50.000 y 60.000 empleados mantendrán su derecho a disfrutar de la cláusula de salvaguarda.

El IPC marcó en diciembre un descenso histórico, al alcanzar el nivel más bajo de los diez últimos años y sitúa a los trabajadores en una situación igualmente novedosa respecto a los últimos años, en los que la paga por revisión salarial estaba asegurada por la permanente escalada de precios. Tanto Eusebio Justo como el responsable nacional de Negociación Colectiva de la CIG, Antolín Alcantará, asumen la realidad de las estadísticas a escasos días de que se confirme el dato del IPC adelantado advierten sin embargo de que mantendrán sus aspiraciones para las negociaciones salariales de 2009. "Los empresarios no han compartido con sus trabajadores los beneficios acumulados a lo largo de estos años y la situación actual no permite que los trabajadores pierdan ni un solo euro de su poder adquisitivo, así que tanto UGT como CCOO mantendrán sus demandas de incremento salarial en la previsión de IPC que el Gobierno maneje para 2009 más un punto o punto y medio de incremento", advierte Eusebio Justo.

Los responsables nacionales de UGT y Comisiones Obreras ya advirtieron el pasado lunes que no aceptarán previsiones de IPC para 2009 por debajo del 2%.

Los funcionarios de la Administración General del Estado podrían ganar algunas décimas de poder adquisitivo este año si la inflación sigue cayendo, tal y como apuntan todas las previsiones, incluidas las del Gobierno.

Los empleados del Estado verán incrementado su salario este año en un 2%, coincidente con el objetivo de inflación que fija el Banco Central Europeo, más un 1% adicional de la masa salarial para igualar las pagas extraordinarias a la mensualidad. A ello hay añadir el 0,5% para dotaciones al fondo de pensiones y el 0,375% correspondiente a fondos adicionales, aunque esto no afecta a todos los empleados públicos. La suma total es un 3,875%, aunque los sindicatos precisan que no es esto lo que va a subir el sueldo de todos los funcionarios este año, pues lo destinado a fondo de pensiones es en realidad un salario diferido y los fondos adicionales sólo se aplican a determinados colectivos y servicios. El responsable de Acción Sindical de la federación de Administraciones Públicas de Comisiones Obreras, José Gálvez, explicó que los empleados públicos sólo perdieron unas décimas de su poder adquisitivo en 2008. Sin embargo, para 2009, Gálvez indicó que el panorama se presenta más "tranquilo" para los bolsillos de los funcionarios, que podrían ganar algo tras ocho años de pérdidas. "La primera congelación salarial nos la hicieron en 1996. A partir de ahí y hasta 2004 perdimos poder adquisitivo. En los últimos cuatro años nos hemos mantenido más o menos", subrayó.

En CSI-CSIF también tienen claro que las ganancias de este año no compensan todo lo que han perdido en los anteriores y criticaron que los funcionarios del Estado "peor pagados de todo el país", y que carecen de cláusula de revisión salarial.