La morosidad de los gallegos fue la tercera menor de España hasta julio, según un informe elaborado por Asnef-Equifax. La población media española que incurre en mora es del 4,3%, con Canarias a la cabeza (7%), seguida de Baleares (5,4%), Comunidad Valenciana (5,3%), Murcia (5,2%), Cataluña y Madrid (5,1%), Andalucía (4,9%), Castilla-La Mancha (4,3%), La Rioja (4,0%), Aragón (3,8%), Navarra y Extremadura (3,6%), Cantabria y Castilla y León (3,3%), Galicia (3,0%), Asturias (2,9%) y País Vasco (2,2%).

La morosidad en Galicia se redujo un 12,2% en julio en tasa interanual, más que en el conjunto de España donde el recorte fue del 1,26%. Sin embargo, la mora entre los extranjeros repuntó en la comunidad en el último año un 31%, por debajo de la media que fue del 42,5%.

Cada vez hay menos españoles morosos pero los morosos cada vez deben más dinero. Así lo asegura el estudio, que indica que la reducción del número de españoles afectados es mayor respecto al volumen de contratos en mora, que superó el 13,74%, pero el saldo moroso se incrementó más del 7,12%.

La deuda impagada por contratos a entidades financieras y grandes compañías por hogares y empresas inscritos en la lista de morosos se incrementó en un 158% en julio, hasta los 41.775 millones de euros, mientras que el número de operaciones morosas declaradas llegó a las 6.631.233 tras aumentar un 49%.

El número de españoles incluidos en el fichero de morosos Asnef-Equifax, el mayor de España, se situó en 1,66 millones al cierre del pasado julio, el 1,26% menos que en el mismo mes del año anterior, lo que supone el primer descenso en los dos últimos años.

El informe indica además que la morosidad "seguirá creciendo en los próximos meses, aunque los últimos datos indican que posiblemente este crecimiento será más suave que en meses pasados". En el caso de las empresas, pese a la reducción de las inscritas en las listas, el número de contratos en mora y saldo reclamado aumentaron un 6,36% y un 134,27%, respectivamente. En paralelo, la morosidad sigue creciendo entre la población inmigrante, debido a que los españoles encuentran más facilidades para refinanciar deudas.

Además, según el informe, la prudencia de las familias españolas en estos momentos de incertidumbre, unido a la baja concesión de operaciones de financiación, ha ayudado a reducir el sobreendeudamiento de nuevos ciudadanos, por lo que la evolución negativa experimentada en los 12 últimos meses está concentrada en gran medida en el empeoramiento de la situación de los titulares incluidos en el fichero tiempo atrás.

En cuanto a la evolución de los españoles afectados en el último año, Castilla la Mancha es la comunidad peor parada con un incremento de la morosidad del 10,9%, seguida de Navarra (+7,7%), La Rioja (+4%), Canarias (+3,1%), Madrid (+3,1%) y Melilla (+0,2%). Los descensos se registraron en Andalucía (-0,1%), Cataluña (-0,3%), Comunidad Valenciana (-3,39%), Castilla y León (-3,4%), Aragón (-3,7%), Ceuta (-4,2%), Murcia (-4,2%), Baleares (-4,56%), País Vasco (-4,5%), Extremadura (-5%), Cantabria (-5,8%), Galicia (-12,2%) y Asturias (-18,4%).

Con respecto a los inmigrantes afectados en el fichero, Castilla-La Mancha es la comunidad peor situada, con un incremento del 80,3% con respecto al mismo periodo del año anterior.