BBVA, el segundo banco español, se coloca como la decimoquinta entidad más importante de EE.UU. gracias a la adjudicación de la mayor parte de los activos y depósitos del tejano Guaranty Financial, que le supondrá un "riesgo mínimo" al tener limitadas las potenciales pérdidas generadas por los créditos.

En un comunicado, la entidad presidida por Francisco González anunció hoy que la operación permitirá al banco elevar un 21 por ciento su volumen de clientes en el país norteamericano al incorporar a 300.000 usuarios procedentes de Guaranty Financial, por medio de la adquisición de activos por valor de 12.000 millones de dólares y de depósitos por importe de 11.400 millones.

Allí dio un salto cualitativo en 2007 con la compra de Compass, que ha absorbido a todos los bancos adquiridos anteriormente y al que se incorporará el Guaranty "a principios de 2010 o antes incluso".

Para hacer frente a los potenciales problemas de la operación, el BBVA ha firmado con la Corporación Federal de Seguro de Depósitos de EE.UU. un acuerdo por el que, en el hipotético caso de que los créditos asumidos resultaran fallidos, tendría que hacer frente a sólo un pequeño porcentaje.

En concreto, la FDIC, como se la conoce por sus siglas en inglés, asumiría el 80% de los primeros 2.300 millones de dólares de pérdidas y el 95% a partir de dicha cifra, con lo que BBVA concluye que la operación tendrá un "impacto inmaterial" en su capital.

"Esta operación responde a una lógica estratégica excelente y constituye una interesante oportunidad de crecimiento para BBVA Compass, ya que nos ayuda a seguir construyendo la franquicia bancaria líder en la región de gran crecimiento del Sunbelt", señaló el máximo responsable de BBVA Compass José María García Meyer.

En concreto, Guaranty le permitirá pasar de 84 a 142 sucursales en California, un "atractivo mercado de alto crecimiento", en tanto que en Texas sumará 106 oficinas, hasta un total de 517, reforzando así su presencia en ese estado con un aumento de su cuota de mercado del 4,9% al 6,4%.

De esta manera, BBVA tendrá un total de 750 sucursales repartidas en Texas, California, Alabama, Florida, Arizona, Colorado y Nuevo México.

El banco presidido por Francisco González se mostró hoy orgulloso de haber acometido una operación de esas características en un entorno "difícil" como el actual.

"El modelo de negocio basado en los principios de BBVA, una gestión de riesgos rigurosa y una posición de capital saneada, han permitido al banco generar un rendimiento superior en el difícil entorno operativo actual, y esto ha dado a BBVA la capacidad de invertir en su franquicia cuando se presentan oportunidades estratégicas atractivas desde el punto de vista financiero", afirmó García Meyer en el comunicado.