La nueva cúpula de NCG Banco anunció ayer que iniciará una auditoría interna para comprobar que las condiciones de los contratos y las indemnizaciones recibidas por los directivos que abandonaron Novacaixagalicia -que suman más de 20 millones de euros- cumplen las normas y no hay irregularidades en las mismas. Los nuevos ejecutivos, capitaneados por el presidente de NCG Banco, José María Castellano, y el consejero delegado, César González-Bueno, pretenden hacer una investigación interna para comprobar que no ha habido irregularidades. En caso de que las haya, explicaron fuentes de la entidad, se tomarán las medidas que el consejo de administración estime oportunas.

NCG Banco, sin embargo, no espera encontrar ninguna vulneración de las normas pero realizará la auditoría por una cuestión ética. Entre los aspectos a analizar está si directivos como José Luis Pego y Javier García de Paredes cumplen las condiciones exigidas al resto de trabajadores para acceder a las prejubilaciones, puesto que estos dos exejecutivos de la entidad tienen 54 y 51 años respectivamente.

La dirección del banco aspira a marcar diferencias en el futuro con el sistema retributivo que aplicaba la caja y pretende que los salarios se establezcan en función de la productividad. De esta forma la nueva entidad no tendrá contratos blindados y los profesionales deberán trabajar duro para lograr incrementos en sus remuneraciones.

Mientras, fuentes de Novacaixagalicia se remitieron a los acuerdos de su consejo de administración y a la información enviada al Banco de España para justificar la legalidad de las indemnizaciones a los altos cargos de la entidad, enmarcadas en el plan de prejubilaciones y bajas incentivadas para 1.200 empleados, dotado con 340 millones de euros. La entidad gallega precisó que las condiciones "para todos los trabajadores, desde el cajero de Lalín hasta el director general", fueron negociadas con los sindicatos y aprobadas "en su amplia mayoría", con la excepción de CGT y CIG, que "consideraban pocas las cuantías". "Todo esto se aprobó en la comisión de retribuciones de la caja, con el apoyo de informes de expertos jurídicos", por lo que hay garantías de "cumplimiento de la legalidad", especificaron desde Novacaixagalicia.

La comisión de retribuciones está formada por seis miembros, entre los que se encuentran los dos copresidentes de Novacaixagalicia, Julio Fernández Gayoso y Mauro Varela, y el expresidente de la diputación de A Coruña y vicepresidente primero de la caja gallega, Salvador Fernández Moreda. Completan la citada comisión Pilar Cirán, Alfonso Zulueta de Haz y Enrique Porteiro, como secretario.

La caja gallega recordó también que el Banco de España "dispone de toda la información" mientras que la entidad presidida por Miguel Ángel Fernández Ordóñez insistió en que no tiene competencias para autorizar las retribuciones o indemnizaciones de los altos directivos de las entidades que supervisa si no afectan a su solvencia.

Sin entrar en detalles sobre las retribuciones a los directivos, fuentes de Novacaixagalicia indicaron que la cuantía de los fondos de pensiones "van en proporción a los salarios", pero que las condiciones de liquidación "son las mismas para todos". La única excepción, reconocieron, es el requisito de la edad, ya que varios altos cargos, "por razones de responsabilidad, la segregación al banco y el cambio directivo", se han acogido a las prejubilaciones sin tener el tope de los 55 años.

Los sindicatos de la entidad gallega, por su parte, exigieron conocer todas las compensaciones pagadas a los directivos que dejaron la entidad y las percepciones de los nuevos responsables de NCG Banco. A los representantes de los trabajadores, sin embargo, no les sorprenden las cifras que se barajan para las prejubilaciones de cuatro de los altos cargos que salieron de la entidad, más de 20 millones.