Pemex ha descartado incrementar su participación en Repsol por encima de su actual 9,5% y asegura que los recursos destinados a la petrolera española no dañarán las inversiones en México, afirmó el director general de la compañía, Juan José Suárez Coppel.

El directivo realizó estas consideraciones durante su comparecencia de ayer miércoles ante las comisiones de Energía y de Hacienda de la Cámara de Diputados mexicana, ante la que defendió el acuerdo de sindicación accionarial en Repsol alcanzado con Sacyr, señala 'El Universal'.

La inversión en Repsol, aseguró, persigue el fortalecimiento y el aumento de valor de la petrolera española, cuyo gobierno corporativo Pemex desea mejorar. La operación cumplió todos los requisitos legales y no requirió el visto bueno del consejo de administración de Pemex, señaló.

"Pemex ha insistido en que no tiene interés en aumentar su participación más allá de lo que implicó la operación reciente, y ha manifestado la importancia de mantener a Repsol como compañía de bandera española independiente", afirmó.

Por su parte, la agencia Apro señala que el diputado del Partido del Trabajo (PT) Mario di Costanzo acusó a Suárez Coppel de violar la Constitución mexicana con la operación en Repsol, en la que se produce un conflicto de intereses.

El directivo negó este extremo. "Pemex no vende gasolinas en España, no vende petroquímicos en España. Repsol vende gas en México, nosotros no compramos gas de Repsol. Si no estamos en el mismo mercado, no somos competidores", argumentó.