El memorando de rescate firmado por el Ministerio de Economía para lograr el préstamo de hasta 100.000 millones de euros, y que tiene condiciones para toda la banca española, menciona cinco veces la palabra reestructuración en el calendario de reformas que España debe acometer hasta junio de 2013. Los sindicatos UGT y CCOO han alertado sobre la nueva oleada de despidos que se cierne sobre el sector, después de que la banca haya prescindido ya de más de 30.000 trabajadores desde el inicio de la crisis financiera. La resolución (venta ordenada de una entidad, entera o por partes) y las futuras fusiones volverán a echar mano de expedientes de regulación (ERE) colectivos "en casi todas las entidades", sostienen fuentes sindicales.

En el caso de Novagalicia, desde la CIG apuntan que el mensaje es que se "exigirán más esfuerzos", pero su máximo responsable en Banca, Clodomiro Montero, cree que las decisiones se tomarán "después de las elecciones". Otros representantes sindicales destacan el "nerviosismo de la plantilla", que se ha reducido ya en 1.771 personas en el último año y medio.

Desde Madrid, y como recogió el diario Cinco Días, las centrales estiman en 20.000 los nuevos despidos, asociados al mandato de Bruselas de "reducir al mínimo imprescindible" la carga de la ayuda financiera al contribuyente. La tesis de la Comisión Europea, defendida por el comisario Almunia, es que las entidades rescatadas que reciban dinero público tienen que "limitar el impacto negativo en la competencia". Esto es, no pueden recibir auxilio si no hacen un esfuerzo para desprenderse de activos y no afectar así a las entidades que no van a precisar del dinero europeo.

Además de los despidos, se da la circunstancia de que las salidas en la banca acarrean cada vez peores condiciones. En el caso gallego, y tras la fusión -que recibió un préstamo del FROB de 1.192 millones de euros-, se formuló un ERE con prejubilaciones para 1.230 personas. El segundo expediente, también cerrado, se ejecutó mediante bajas incentivadas. El tercero, abierto hasta 2014, impone un límite de 200.000 euros sin exenciones fiscales, apuntaron desde el sindicato Csica.

Este tercer procedimiento incluye reducciones de jornada o suspensiones de contrato. Las firmas nacionalizadas (Bankia, Novagalicia Banco, Catalunya Caixa y Banco de Valencia) serán las primeras en recibir la inyección del dinero europeo a cambio de cumplir unos requisitos estrictos y de presentar un plan que demuestre "tener un plan creíble para volver a la viabilidad", según Almunia. Las ayudas de Estado acarrean una reducción de capacidad, lo que conlleva cierres de sucursales.

El Banco de España traslada hoy a la cúpula de Novagalicia Banco el resultado del test de estrés realizado por Oliver Wyman en base a los datos recopilados por la auditora KPMG. Las cifras oficiales no se conocerán hasta el viernes, de modo que la entidad tendrá tres días para preparar su comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De todas formas, el calendario no se interrumpe y la entidad debe formular un plan de reestructuración, aunque deberá ser aprobado por las autoridades europeas.

Inyecciones en noviembre

El calendario del memorando de rescate (MoU) establece que el análisis de Bruselas se hará "durante el mes de octubre", con vistas a inyectar el dinero necesario en la entidad a principios de noviembre. En el plan, la dirección de Novagalicia deberá formular lo que Economía ha denominado "gestión de instrumentos híbridos", conocido comúnmente como el canje que va a ofrecer a los tenedores de preferentes y subordinadas, que asumirán una quita. La inyección de capital llegará después del ejercicio de reparto de cargas por lo que, si se cumple el calendario, esta tendría lugar a finales de octubre.