Los españoles se sienten desorientados y sin amparo legal frente a las compañías eléctricas, con las que la mitad de los usuarios han tenido problemas, según los resultados de dos encuestas realizadas por las instituciones de la UE y recogidas en un informe de la Comisión Nacional de Energía (CNE). Sus conclusiones sitúan al consumidor de España como el segundo de Europa que más desprotegido se ve frente a las compañías suministradoras, por detrás de los belgas.

La CNE ha aprobado y publicado su Informe sobre la evolución de la competencia en los mercados del gas y electricidad una semana después de que el Gobierno diera luz verde a su proyecto de reforma energética, una iniciativa legislativa que se centra en la creación de nuevos impuestos para reducir el déficit tarifario y que gravarán en primera instancia a las compañías generadoras, aunque se da por hecho que tales tributos acabarán repercutiendo en el precio de la luz. El encarecimiento de la electricidad y los impactos de los cambios regulatorios impulsados por los distintos Gobiernos pueden estar detrás de lo que revelan los sondeos realizados por la CE. Sus conclusiones se sintetizan en los siguientes puntos:

. Problemas. Casi uno de cada tres consumidores encuestados en España (29%) responde que ha tenido algún problema con su empresa suministradora de luz.

. Desconfianza. El 48% de los usuarios no confía en que los suministradores cumplan con las normas de protección de los consumidores. Sólo Bélgica presenta un resultado peor.

. Desorientación. El 49% de los entrevistados considera difícil comparar los servicios y precios ofrecidos por las compañías en el mercado libre, un aspecto que la encuesta europea considera altamente relevante.

. Satisfacción. El 30% de los encuestados afirma sentirse insatisfecho con el servicio prestado por las compañías eléctricas, si bien el sondeo no diferencia ni por comunidades autónomas ni por empresas suministradoras. En este índice de satisfacción global, de nuevo España aparece por detrás de Bélgica.

Al hilo de esas respuestas, el informe hace la siguiente reflexión: "En un entorno liberalizado, pero no carente de fallos de competencia, resulta imprescindible una mejora de la regulación de los derechos de los consumidores". Y añade el regulador energético sobre la posición de los usuarios en el mercado libre: "Los consumidores carecen de la protección legal y de la información que serían necesarias para ejercer de manera efectiva su derecho a elegir suministrador".