Además de las amistades peligrosas de Méndez, la Fiscalía Anticorrupción tiene sobre la mesa otra operación que pone en cuestión la gestión de un viejo conocido suyo, el responsable del grupo inmobiliario de Novacaixagalicia, Gregorio Gorriarán, ya investigado por Anticorrupción e imputado por haber modificado su contrato de alta dirección en Caixanova que le abrió la puerta al cobro de una indemnización millonaria cuando se prejubiló voluntariamente en Novacaixagalicia antes de cumplirse un año de la fusión: 4,8 millones a los que se suma un plan de pensiones de 9,2.

De las nueve operaciones que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha enviado ya a la Fiscalía Anticorrupción por supuestas irregularidades se encuentra un crédito de 60 millones de euros concedido por Caixanova a la inmobiliaria Rivas ACI SL, en 2007, el mismo año en que la firma empezó a operar con un capital social de 3.500 euros, según consta en el Registro Mercantil de Madrid. El préstamo, como adelantó el jueves Expansión, estaba destinado a la compra de una parcela de 40.000 metros cuadrados en el Ayuntamiento de Rivas-Vaciamadrid.

La promotora de Caixanova, Proinova, tuvo que quedarse con el terreno en 2010 porque Rivas ACI SL no llegó a devolver el préstamo. Como explicaba a este diario un exdirectivo de las antiguas cajas gallegas, en referencia a la investigación, el FROB ha tenido que encontrar en estas operaciones indicios de irregularidad, dado que créditos fallidos como éste último o los de Astroc hay cientos de miles no sólo en las cajas gallegas sino en toda la banca española.