La treintena de transportistas gallegos que distribuyen los refrescos de la marca Coca-Cola en Galicia preparaban a última hora de ayer el levantamiento del paro que bloqueó durante dos días la planta coruñesa de envasado Begano, tras alcanzar un acuerdo con Coca-Cola Iberian Partners, la sociedad que gestiona las plantas embotelladoras de la marca en España. La firma, fruto de la fusión de Begano y otras siete sociedades similares distribuidas por toda España, aceptó tras seis horas de reunión con los representantes de los camioneros, mantener sus condiciones de trabajo y económicas. Los conductores seguirán realizando la distribución del producto dentro de la comunidad autónoma gallega y mantendrán su relación contractual directa con Coca-Cola Iberian Partners, en la que ahora está integrada Begano, con las mismas tarifas.

El operador logístico aragonés Transportes Sesé, al que la firma adjudicó los servicios logísticos de la cornisa cantábrica -desde Galicia a País Vasco- el pasado 12 de abril también mantendrá su contrato y cargará en la planta coruñesa, aunque sólo para realizar el transporte fuera de Galicia. Iberian Partners se compromete además a compensar las condiciones de algunos profesionales cuando la carga de trabajo descienda en algunos meses respecto de la media.

El acuerdo también incluye el compromiso de la envasadora de abrir un proceso de negociación con una representación de los conductores gallegos para incrementar el peso del sector de la comunidad en la logística de Coca-Cola en el resto de España. Los transportistas quieren ganar cuota de mercado en la reorganización de las rutas de transporte de Coca-Cola, derivadas del cierre de cuatro plantas y la reorganización societaria de las sociedades embotelladoras, aún en marcha.

El acuerdo fue respaldado por una amplia mayoría de la treintena de afectados, reunidos en asamblea a las nueve y media de la noche de ayer. Este apoyo al pacto sirvió para poner fin a la reunión iniciada a las cuatro de la tarde en el hotel Attica 21 y en la que participaron un grupo de transportistas, dos abogadas del colectivo y representantes de Coca Cola Iberian Partners. Al cierre de esta edición, los autónomos esperaban a recibir una copia del acuerdo por escrito para poner fin al paro y levantar el bloqueo de Begano.

La planta coruñesa apenas distribuyó producto en los dos últimos días, desde que a las doce de la noche del domingo los transportistas iniciaron el paro y una delegación de representación montó guardia frente al acceso con una pancarta. Cinco camiones del grupo Sesé accedieron a la planta el lunes, cargaron mercancía y salieron de la planta pero Begano decidió interrumpir la distribución después de que supuestamente uno de los vehículos de Sesé fuese alcanzado por una piedra arrojada desde un puente sobre una carretera.

La planta volvió a intentarlo a primera hora de ayer, cuando otros cuatro camiones accedieron a la planta escoltados por la Policía Nacional. El presidente de la Federación Empresarial de Transportes de Mercancías por Carretera de Galicia (Fetram), Fernando Teijeiro, advirtió entonces al director general de la planta y al responsable de logística de Coca-Cola Iberian Partners que de seguir con la carga, el sector no acudiría a la reunión convocada a las cuatro de la tarde de ayer. Begano decidió entonces paralizar la carga y los camiones se quedaron dentro hasta ayer por la noche.

Fetram y la Federación Galega de Transportes (Fegatrans) lanzaron ayer un aviso a navegantes al advertir de que darán la batalla para erradicar conductas como la adoptada por Coca-Cola Iberian Partners de Galicia, que pretendía imponer a los transportistas que empezasen a trabajar para el operador maño Sesé con tarifas más bajas que, según denunciaron, no les permitían cubrir costes de explotación. "Defenderemos las condiciones de los conductores y agencias de transporte gallegas y erradicaremos prácticas especuladoras como las de los grandes operadores que pretenden implantarse aquí. Con la Administración a favor o en contra", dijo Fernando Teijeiro, quien confirmó en declaraciones a este diario que desde que estalló el conflicto con Begano no recibieron ninguna llamada de responsables de la Xunta, ni siquiera de Industria y Traballo, que ayer también se ofreció públicamente a mediar.