La plantilla de Rede Galega de Kioskos (Regaki) acusa al administrador concursal de la firma, en suspensión de pagos desde octubre, de no negociar con buena fe al no facilitar la información económica que los trabajadores le reclaman, clave para la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) en el que ambas partes se encuentran en este momento. El administrador alega que no dispone de información sobre Galega de Economía Social (GES), el grupo empresarial dueño de Regaki.

Las partes se sentaron ayer en la tercera reunión de su periodo de consultas sin llegar a acuerdo alguno. Los representantes de los trabajadores insistieron una vez más en solicitar un ERE de suspensión mientras no se resuelven los despidos, que tras el periodo de negociación, aún tendrán que ser aprobados por el juez. Su objetivo es al menos poder empezar a cobrar la prestación por desempleo, tras acumular ocho nóminas sin cobrar y cuantiosas deudas. La administración concursal, que inicialmente vio posible este trámite, aunque solo después de concluir la actual negociación, ayer se negó y apostó por continuar con el despido colectivo. Los trabajadores aprecian mala fe en este cambio de opinión.