El Tesoro Público esquivó la crisis bursátil en Asia y colocó ayer 3.965 millones de euros en letras a 3 y 9 meses, con el mismo interés que en la anterior subasta en el caso del papel a 9 meses, pero con tipos negativos en la referencia a 3 meses. De esta forma, el organismo se quedó en la parte alta del rango, ya que esperaba captar entre 3.000 y 4.000 millones en la subasta, la última del mes de agosto. La demanda, por su parte, superó los 7.300 millones. El organismo emitió 375 millones en letras a 3 meses, el papel a más corto plazo que ofrece a los inversores. La demanda de esta referencia ha sido de 2.046 millones, casi 5,5 veces lo vendido.

El Tesoro consiguió que la rentabilidad de las letras a 3 meses se mantenga en cifras negativas, con un tipo medio del -0,072%, frente al -0,053% de la subasta anterior, marcando así un nuevo récord histórico. El marginal también se mantuvo en valores negativos (-0,067% frente al -0,05% de julio).