La titular del juzgado de lo Mercantil número 1 de A Coruña, Nuria Fachal Noguer, aprobó el pasado martes el plan de liquidación de Martinsa Fadesa que presentaron los administradores concursales del grupo inmobiliario para vender los activos y hacer frente con ellos a la deuda de 6.995 millones de euros de la firma, que fue incapaz de hacer frente al calendario de pagos del convenio de acreedores que pactó para salir del concurso, en marzo de 2011.

El plan de liquidación está de hecho en marcha con la venta de un primer paquete de 33 activos inmobiliarios -parcelas, pisos, locales comerciales y garajes- en Huelva, Málaga, Canarias, Madrid, Palma de Mallorca y A Coruña. Entre ellos locales comerciales en Cambre, Novo Mesoiro, suelo rústico en Culleredo y plazas de parking en Valaire (A Coruña). La fecha límite para presentar ofertas es el 8 de octubre.

La jueza confirma en un auto el plan de liquidación elaborado por los administradores con alguna salvedad introducida a petición de los acreedores. La juez, sin embargo, rechaza todas las planteadas por Martinsa Fadesa. Los responsables del grupo reprochaban por ejemplo que el plan de liquidación no previese la venta de la empresa como primera opción para hacer frente a la deuda. La magistrada expone sin embargo que para ello sería necesario que la firma estuviese en condiciones de mantener su actividad, cuando la realidad es que la firma "ha reducido su actividad exclusivamente a la venta de activos de su titularidad", ha "abandonado por completo la actividad de promoción y desarrollo urbanístico", a lo que se suma el ERE autorizado por el juzgado para despedir a sus trabajadores. Martinsa Fadesa discutió, según se desprende el auto, que la valoración de los activos incluida por la administración concursal en el plan de liquidación es "inadecuada", a pesar de que, recuerda la juez, es la misma que sirvió de base para la propuesta de modificación de convenio de acreedores que la firma presentó a la banca en diciembre de 2014 sin éxito. "El Plan Aurora que la concursada presentó a los acreedores en enero de 2015 con el fin de eludir la liquidación de la compañía partía de las mismas valoraciones que acepta ahora la administración concursal", añade la juez.

El plan establece una liquidación de activos en tres fases; una primera de venta directa de activos libres para atender créditos contra la masa y con privilegio general. En caso de que no cubrirse con este modelo, se abriría una subasta privada. La segunda fase para activos afectos a privilegio especial para atender este tipo de créditos, a través de venta directa, dación en pago a los bancos o subasta notarial. Y una tercera fase de venta de activos para atender los créditos ordinarios.

Una vez finalizados estos procesos, los administradores conformarán una bolsa de activos que venderán por lotes. Los administradores tendrán que presentar su primer informe de liquidación antes del 29 de diciembre próximo.