Aún sin pasar estrecheces en el día a día, hay familias que tienen dificultades para hacer frente a gastos extraordinarios. El pasado año, 438.017 residentes en Galicia de 16 o más años manifestaron que necesitaban consultar a un médico o dentista y que no lo hicieron en el último año.

El principal motivo que señalan es que resulta demasiado caro (47,63%, un total de 208.620 gallegos). Otra de las razones que aducen (el 16,85%) es que no disponían de tiempo debido al trabajo u otras obligaciones. Como en la situación económica general de los hogares, es Pontevedra donde más personas alegan motivos económicos para no acudir a un médico o dentista, nada más y nada menos que el 57% de quienes dicen necesitarlo. Mientras, Ourense es la otra cara de la moneda, donde sólo un 39,4% de los consultados lo atribuyen al alto precio de estos servicios. A Coruña (con un 42% de los encuestados) y Lugo (43%) se encuentran por su parte en un nivel intermedio.