Inveravante, el holding empresarial del fundador de Fadesa, Manuel Jove; la constructora ourensana Ranebé 2003 y la naviera viguesa Rodman tampoco recuperarán los 8,5 millones que invirtieron en Novagalicia en 2012 para intentar conservar una entidad bancaria con capital gallego. Así al menos lo recoge una sentencia de la Audiencia Provincial de A Coruña que acaba de hacerse pública. El fallo revoca el dictado en diciembre de 2014 por el juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña que daba la razón a los inversores gallegos en su pleito contra el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para recuperar la inversión que perdieron en 2013 cuando el banco fue rescatado con fondos europeos y su capital previo reducido a cero.

El fallo unifica así el criterio que la Audiencia Provincial sostuvo en julio pasado ante el recurso que el fondo de rescate bancario planteó en la sentencia que inicialmente dio la razón a GadisaGadisa (10 millones) y el que el 3 de mayo pasado confirmó la sentencia del juzgado de Primera Instancia número 5 de A Coruña en contra de las pretensiones de Hijos de RiveraHijos de Rivera y otras seis empresas, que se dejaron 20 millones en el proyecto fallido.

El tribunal entiende que ni el fondo de rescate bancario ni Novagalicia (hoy Abanca), que fue codemandada, engañaron a los empresarios, que debían haberse asesorado como inversores cualificados que, en su opinión, son.

Junto con Inveravante, Ranebé 2003 y Rodman, el fallo echa por tierra las pretensiones de Santiago Rey Fernández-Latorre. Los inversores gallegos invirtieron un total de 71 millones de euros en Novagalicia en un intento por preservar su galleguidad y lo perdieron casi un año después.