El conjunto de los asalariados gallegos perdió un total de 1.211 millones de euros de renta desde el inicio de la crisis, mientras que los beneficios de las empresas asentadas en la comunidad aumentaron en 523 millones, lo que demuestra el distinto impacto que han tenido las dificultades económicas en las rentas de los trabajadores y de los empresarios, según los datos publicados ayer por el sindicato UGT. Las remuneraciones de los empleados gallegos ascendían en 2007 a 26.116 millones, frente a los 24.905 millones del año pasado, lo que equivale a un descenso del 4,6% desde el estallido de la crisis. El peso de los salarios en el PIB en términos de renta pasó además en estos ocho años de suponer el 46,2% del total al 44,5%, según los datos facilitados por el sindicato a partir de los publicados por el Instituto Galego de Estatística (IGE).

Mientras, los excedentes de explotación de las empresas subieron desde los 24.857 millones alcanzados antes de comenzar la crisis a los 25.381 millones en 2015, un alza del 2,1%. En cuanto a su peso en el PIB, pasaron del 44% en 2007 al 45,3% el año pasado, por lo que las rentas empresariales tienen ya mayor relevancia que los sueldos en el reparto de la riqueza.

El peso de los impuestos sobre la producción y las importaciones, por su parte, pasó del 9,8% al 10,2% del PIB en estos ocho años de dificultades. En términos absolutos, subió desde los 5.528 millones de 2007 a los 5.683 millones, 155 millones más (+2,8%).

Esta situación de pérdida de rentas salariales y de mejora de las ganancias de las empresas revela que el trabajador es el principal perjudicado por los ajustes y recortes aplicados en estos años, por lo que el sindicato urge a cambiar "el modelo de crecimiento injusto y desequilibrado que incrementa la desigualdad y la pobreza".

Efectos de las reformas

UGT-Galicia considera que los trabajadores son los que han pagado la factura de la crisis -"una crisis que ellos no generaron"- y que "las grandes culpables" de esta situación son las reformas del mercado laboral y de la negociación colectiva. "Las nuevas normativas contribuyen de forma decisiva a la pérdida de renta de los salarios, dejando el porcentaje de las remuneraciones de las personas asalariadas en mínimos históricos, todo lo contrario que les pasa a los excedentes de explotación/rentas mixtas", resalta el sindicato. "Existe un claro trasvase del que salen ganando las rentas empresariales", remarca UGT.

La central sindical censura igualmente los "bajos salarios y recortes impuestos", a los que responsabiliza del incremento de los niveles de pobreza y exclusión social. Por ello, considera que los sueldos "tienen que empezar a crecer para impulsar el empleo de calidad, fomentar el cambio de modelo productivo, recomponer los ingresos de la Seguridad Social y reducir los niveles de desigualdad y pobreza". "En 2014, último dato disponible facilitado por el IGE, el 22% de la población en Galicia se encontraba en riesgo de pobreza o exclusión social. Y España registra el cuarto nivel más elevado de la UE", alertan los responsables de UGT en Galicia.