El juicio laboral entre el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y el exdirectivo de Novacaixagalicia Javier García de Paredes que se iba a celebrar el próximo lunes 27 en A Coruña ha quedado suspendido por la ausencia de un testigo y porque el 28 se incorpora la nueva titular del juzgado de lo Social número 3 de la ciudad, que lleva el caso.

La vista estaba prevista para este lunes, aunque el juzgado tenía reservada la sala también para los días 28 y 29. El día 27 estaba prevista una videoconferencia con un testigo importante, pero el lunes no va a estar en la ciudad en la que reside habitualmente. Una vez que el juzgado informó de esta eventualidad y de la toma de posesión prevista para la juez, una de las partes reclamó la suspensión y se acordó, según fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG).

Por el momento no hay nueva fecha fijada, que se establecerá una vez se haya incorporado la nueva titular. En el juicio, el FROB reclama a García de Paredes el finiquito de 5,6 millones de euros que cobró cuando abandonó Novagalicia, en noviembre de 2011. El FROB llegó a solicitar mantener el embargo que en su día se decretó en la causa penal como medida cautelar que el juzgado rechazó, según fuentes próximas al exdirector general adjunto de NCG. Si bien, García de Paredes accedió a mantener su vivienda como aval para asegurar el cobro de las cuantías percibidas en su día.

La Sección Tercera de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional absolvió al exdirectivo de la entidad resultante de la fusión de Caixa Galicia y Caixanova después de que la Fiscalía retirara su acusación en la fase de informes del juicio, celebrado en julio de 2015. El FROB había promovido el proceso laboral contra García de Paredes en 2012 pero la causa penal en la Audiencia Nacional obligó a posponerlo a la espera de sentencia. El fallo, que en octubre pasado lo absolvió, reactivó la causa laboral, ahora pendiente de juicio.

Ya en 2011, el equipo de NCG que negociaba con exejecutivos de la caja de ahorros para intentar solucionar la polémica desatada por los más de 18 millones de euros que se repartieron en indemnizaciones cuando se prejubilaron anunció que había llegado a un acuerdo con el exdirector general adjunto de Novacaixagalicia para que renunciase "a la mayor parte" de su indemnización. Ese pacto sin embargo quedó sin efecto por la apertura de la investigación que motivó una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción. García de Paredes fue el único exdirectivo absuelto, mientras que los ejecutivos procedentes de Caixanova José Luis Pego, Gregorio Gorriarán y Óscar Rodríguez Estrada fueron condenados a dos años de cárcel y a devolver sus retiros por administración desleal, falsedad y apropiación indebida junto con Julio Fernández Gayoso y el abogado Ricardo Pradas, que supuestamente les asesoró para modificar al alza sus contratos de alta dirección e indemnizaciones por despido antes de que la caja viguesa se fusionase con Caixa Galicia. El contrato de García de Paredes se realizó posteriormente y el exdirectivo había solicitado rebajar su posible compensación en ese momento, motivos que llevaron a la Fiscalía a pedir su absolución, aunque sólo tras la celebración del juicio.