Merlín y Metrovacesa notificaron ayer a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) su fusión, una operación con la que constituirán la principal inmobiliaria española y una de las mayores de Europa, y que prevén culminar antes de fin de año. La Comisión tiene un mes para analizar el proyecto, que originará una compañía con una cartera valorada en 10.000 millones de euros y que tendrá al Santander como primer accionista.