Intasa, la división maderera del grupo Gadisa, volvió el pasado ejercicio a beneficios, con un resultado antes de impuestos de 3,4 millones después de incrementar su facturación un 32%, hasta los 97 millones. El grupo se convierte así en el segundo fabricante del sector con capital 100% español -por detrás de la también gallega Finsa- y uno de los cinco primeros del país.

La firma está a punto de concluir una profunda reestructuración y renovación tecnológica que acumula 25 millones de inversión en los últimos cuatro años y de la que empezó a recoger sus frutos el año pasado.

Intasa es una de las firmas fundacionales del holding controlado por la familia Tojeiro que se dedica a la fabricación de suelos y de tableros de aglomerado para la construcción y la fabricación de muebles. Tiene cuatro centros de trabajo en la provincia coruñesa que dan empleo directo a 318 personas y ha aprovechado la crisis del sector -ligada a la de la construcción- para fortalecerse financiera y tecnológicamente.

La compañía pretende duplicar la facturación del año pasado, en el que vendió 1,5 millones de metros cuadrados de suelos y 300.000 metros cúbicos de tableros . El grupo está formado por Intasa, con sede en San Sadurniño; las pontesas Galparquet y Rechapados del Eume y por Unemsa, que genera un 30% del negocio de la firma y que acaba de invertir 3 millones de euros de renovar de arriba abajo su factoría de Coristanco.

La mejora, tanto en el plano mecánico y tecnológico como en el de seguridad y la energía, permitirá a Unemsa incrementar un 50% su capacidad de producción, según explicó ayer el grupo en un comunicado. La nueva planta de Unemsa permitirá según el presidente de Intasa, Roberto Tojeiro Peleteiro, no sólo mejorar la competitividad y eficiencia sino garantizar "la sostenibilidad de altos estándares de calidad y optimizar el nivel de servicio que prestamos a nuestros clientes".

Tojeiro Peleteiro es primo de Roberto Tojeiro Díaz, creador de supermercados Gadis e Intasa es una de las patas del grupo Tojeiro o Gadisa, que mueve un negocio de más de 1.000 millones de euros. El grupo maderero aporta un 10% de ese volumen total y mantiene sus cuatro centros de trabajo en Galicia, en donde adquiere cada día 1.500 toneladas de madera de pino y eucalipto, y desde donde exporta un 30% de su producción a más de 40 países. La compañía cuenta además con plantas de cogeneración y biomasa que le abastecen de energía. La profunda recesión del sector, que desencadenó numerosas operaciones corporativas, catapultó a Intasa como segundo grupo maderero de capital español.