La constructora española ACS acaba de vender Urbaser, su filial de servicios de limpieza viaria y recogida y tratamiento de residuos, a Firion Investments, firma controlada por un grupo chino, por un importe que oscilará entre los 1.164 y 1.399 millones de euros, según anunció ayer la compañía presidida por Florentino Pérez. El grupo logrará así una plusvalía de entre 325 y 560 millones de euros con esta operación, cuyo cierre está pendiente de lograr las pertinentes autorizaciones y que afecta, entre otros activos, a la planta de tratamiento de basuras de Nostián (A Coruña).

El importe final de la transacción y la correspondiente ganancia dependerán de "determinados parámetros económicos futuros" de Urbaser, según detalló la constructora a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

En virtud de los términos acordados para la operación, la filial de ACS se valoró en entre 2.212 y 2.463 millones, importe que incluye la deuda de la empresa.

ACS enmarca la venta de Urbaser -que cuenta con alrededor de un millar de empleos en Galicia- en su estrategia de rotar activos que considera maduros y no estratégicos con el fin de lograr recursos para seguir reduciendo su deuda e invertir en nuevos proyectos.

Urbaser, a la que el grupo liderado por Florentino Pérez tenía en venta desde hace casi un año, cuenta con importantes contratos del servicio de recogida de basuras en algunas de las principales ciudades de Galicia y de España.

Al margen del territorio nacional, la compañía tiene una destacada actividad en Francia, donde cuenta con varios contratos de limpieza y recogida de basuras del centro de París, y en Reino Unido. También tiene contratos en el Norte de África, México, Chile y Argentina.

Urbaser cuenta con una plantilla de unos 28.000 trabajadores y presentaba una cartera de contratos por valor de unos 8.500 millones de euros y una facturación de unos 1.650 millones de euros al cierre del ejercicio 2014, según los últimos datos facilitados por la empresa.

La venta de esta compañía supone la principal desinversión que cierra ACS desde que en febrero de 2015 sacó a Bolsa Saeta Yield, la filial que constituyó con sus parques eólicos y plantas termosolares. El grupo tuvo previamente a la venta estos activos, pero la operación se vio obstaculizada por coincidir con la reforma energética aprobada por el Gobierno.

En lo que va de este año, antes de Urbaser, ACS vendió el grueso de la participación que tenía en un conjunto de estaciones de la línea 9 del metro de Barcelona y en la sociedad que las mantiene al fondo John Laing Infrastructure, y una participación del 50% en sociedades concesionarias de líneas de transmisión eléctrica de Brasil a Brookfield.