Otro de los platos fuertes de la primera jornada del Congreso nacional de la empresa familiar fue la mesa redonda en la que participaron tres representantes de tres empresas familiares que son centenarias. Los ponentes fueron Mauricio González-Gordon, presidente de González Gordón; Joaquín Uriach, presidente del Grupo Uriach, e Ignacio Rivera, consejero delegado de Estrella Galicia.

Rivera reveló durante un momento de su intervención que tuvieron asesores que les recomendaron quitar "Galicia" del nombre de la cerveza Estrella Galicia. La explicación que daban, según el consejero delegado, es que la percepción que tendrían fuera de la comunidad es que era una cerveza regional. "Esos asesores ya no trabajan con nosotros", reconoció con una sonrisa. Antes había insistido en varias ocasiones en que están "muy orgullosos" de sus orígenes y que es muy importante ser fieles a esos orígenes.

Rivera también consideró que "es importante centrarse en un foco, no abarcar mucho, sino especializarse en un sector". Para el consejero delegado de Estrella Galicia ser fiel a esos orígenes y poner el foco en un mercado son dos de las claves más importantes para que una empresa familiar como es Hijos de Rivera sea centenaria.

Rivera también abordó las relaciones familiares dentro de una empresa familiar. "La empresa familiar es como una familia. Hay los conflictos sanos que tiene una familia. Las reglas de funcionamiento han ido cambiando", afirmó para apuntar a continuación que separar la familia del consejo de administración les ha beneficiado. "Tiene que entrar en la empresa el familiar que lo valga, no por ser miembro de la familia", apuntó.

Para explicar esas rencillas familiares que puede haber en cualquier empresa apeló al humor. "Nosotros tenemos una empresa cervecera y con una caña siempre se arreglan las cosas. Imaginad que tuviésemos una empresa de bates de béisbol", explicó con una sonrisa. Rivera comentó que a los familiares les dejan trabajar durante un tiempo en la empresa y después los invitan a que inicien su trayectoria profesional. Luego ya se pueden incorporar a los órganos de dirección.

En la mesa redonda también estuvo Mauricio González-Gordon, presidente de González Gordón, quien apuntó que "el aspecto más importante para la supervivencia de una empresa familiar es el deseo de que pase de generación en generación".

El otro ponente Joaquín Uriach, presidente del Grupo Uriach, aseguró que el secreto de la longevidad de una empresa familiar es saber poner orden en el complejo mundo de las familias que hay dentro de esa empresa.

Para Uriach, mantener el crecimiento de una empresa familiar depende de cada generación, del valor que cada una le dé a esa empresa. "En nuestro caso cada generación ha tenido unos valores claros que se los ha creído. Cada generación quiere entregar la empresa con un valor mayor que el que recibieron", finalizó.