Cándido Hermida empezó como ebanista artesano y desde que Inditex se cruzó en su camino es el propietario de un grupo cada vez más industrializado que sin embargo funciona como una gran familia, de 500 personas, con varias parejas de hermanos, padres e hijos y hasta matrimonios como empleados de la firma, que facturó 56 millones de euros en 2016.

La madera es su especialidad, aunque también desarrolla trabajos en carpintería metálica y otros materiales. El 83% de los bultos que salen de su nave, prácticamente just in time -carece de almacén- van con destino a las tiendas de la multinacional, sobre todo Zara y Zara Home. Toda la madera que entra en la nave con destino al grupo está certificada con sellos como FSC, que garantiza el respeto con el medio y con los derechos civiles y laborales.